Gracias a los avances en sustentabilidad, cada año surgen iniciativas que cubren varias problemáticas ambientales y sociales. Estos son los proyectos que queremos potenciar y dar a conocer, porque marcan una diferencia.
Tal es el caso de FUNYI, una compañía de accesorios que combina de manera integral los siguientes pilares: accesorios funcionales de protección contra los rayos del sol, la creación de empleo local, la selección de materiales textiles sostenibles y el cambio hacia un tipo de economía circular.
Empresa de impacto positivo
FUNYI es un proyecto de triple impacto argentino que diseña, confecciona y comercializa sombreros, pilusos y accesorios sustentables, bajo condiciones éticas y en el marco del comercio justo.
Forma parte de un conjunto de empresas conscientes que buscan mostrar que una nueva economía es posible, y que importan tanto los resultados, como los materiales utilizados y el compromiso social con las personas.
La empresa desarrolla productos de primera calidad, con materias primas recicladas, buscando reducir el gran impacto ambiental que genera la industria textil. Confeccionan sombreros, Tote bags, bolsos y mochilas, entre otros accesorios.
La inspiración del nombre es más que simbólica: FUNYI proviene de la palabra “Fungi”, que en Latín se utiliza para designar a los hongos o setas (según el país). Tal como se conocen en la naturaleza, los hongos son regeneradores, permiten unir diferentes ecosistemas y se reproducen en diversos lugares y climas, lo que les permite ser sumamente adaptables.
Con esta idea de “regeneración”, los creadores de la marca ofrecen una alternativa de moda sustentable y atemporal, que incluye el reciclaje de los productos y la reutilización de los materiales, acciones que ayudan a preservar el medioambiente.
Funcionalidad y estilo
Los sombreros, principal producto de FUNYI, tienen una utilidad clave en nuestro guardarropas: nos protegen de los potentes rayos UV y UVA del sol, sobre todo en climas cálidos y en los veranos más intensos.
Bien sabemos a esta altura que algo de exposición solar es más que necesaria para sintetizar la vitamina D, pero pasados los 30 minutos, la radiación ultravioleta puede dañar las capas más profundas de nuestra piel, ocasionando problemas de salud y estéticos.
Por este motivo, cubrir la piel y la cabeza del sol previene diversas problemáticas, y ¿qué mejor que hacerlo con accesorios que, además de funcionales, sean lindos estéticamente?.
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La importancia de crear cadenas productivas sostenibles
Es destacable que la marca da trabajo a los sectores más vulnerables de nuestra sociedad. En un país con altas tasas de inflación y pobreza estructural, ofrecer empleo en condiciones justas y éticas es fundamental para avanzar y revertir la situación.
FUNYI capacita y acompaña el crecimiento de cooperativas de trabajo y talleres productivos de diferentes ONG'S, posibilitando nuevas oportunidades laborales a las poblaciones de escasos recursos. Actualmente, por ejemplo, realizan acciones en conjunto con la ONG Sonrisas, del partido de Esteban Echeverría, donde guían el proceso de producción de uno de los centros.
Su objetivo principal es tender puentes para que el trabajo digno y el consumo consciente se encuentren al servicio de la moda y el cuidado del planeta.
Los materiales importan
Desde su origen, la compañía tiene claro que la forma, color y tejido de sus productos cuenta, y mucho.
En un mundo ampliamente contaminado por microplásticos y considerando que la industria textil es la segunda más contaminante del mundo, FUNYI decidió ser parte de la solución.
Bajo el lema: “El consumo consciente al servicio de la moda y el cuidado de nuestro planeta”, confeccionan los sombreros y accesorios en materiales como el algodón puro, e incluyen otros de reutilización, como el algodón reciclado y el poliéster reciclado.
Esto permite crear productos basados en un proceso artesanal y ético, que además cuenta con el valor agregado de ser 100% nacional, ya que todo se realiza en Argentina y gracias a manos locales.
También se enfocan en la concienciación respecto a los hábitos de consumo y la necesidad de acercarnos a una economía circular, donde además de reciclar y reutilizar lo que ya existe, evitemos el exceso de prendas y objetos de indumentaria que están contaminando los ecosistemas.
Sumate a este viaje de conciencia ecológica y diseño sustentable. Existe otra manera de producir, trabajar y consumir.