Suculentas: cómo cuidarlas y regarlas sin que se ahoguen

Las plantas suculentas se han convertido en un must en los hogares. Y es que se adaptan a todo tipo de ambientes, tanto exteriores como interiores.

En los últimos años, las personas se acercaron más a las cuestiones sustentables: consumo responsable, dietas saludables, huertas y viveros en los propios hogares, y eso llevó a que muchos incorporen plantas como las suculentas.

Quizás esto tenga que ver con que luego de la pandemia la sociedad tomó consciencia con respecto a sus actos y las consecuencias que los mismos generan en el ambiente, conectándose más con la naturaleza.

Por eso, qué mejor que rodearse de la misma en el propio hogar e incorporar un poco de verde en los espacios interiores y exteriores de la casa.

Además, las personas comenzaron a pasar más tiempo en sus viviendas e incluso trabajar desde las mismas, por lo que todos los problemas, que antes quizás quedaban en la oficina, ahora se producen en el hogar.

Por eso, es importante hacer una buena limpieza de energías de vez en cuando y para esto nada mejor que plantas de interiores y exteriores que ayuden a renovar y purificar el aire como las suculentas.

Asimismo, se ha comprobado que las plantas o flores tanto de interior como de exterior colaboran con reducir el estrés, algo que siempre ayuda, sobre todo en estos momentos difíciles por los que atraviesa el mundo.

Y para esto no es necesario ser un experto en botánica. A diferencia de lo que muchos piensan. cualquier persona puede tenerlas en sus hogares, siempre y cuando se tengan los cuidados pertinentes para cada especie.

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¿Qué son las suculentas? Características

Pero, antes de hablar sobre los cuidados de estas plantas, ¿qué son las suculentas?

Su nombre proviene del latín succulentus, que significa “llena de jugo”. Esto se debe a que este tipo de plantas posee un órgano especializado en el almacenamiento de agua en cantidades mayores que otras que no tienen esta adaptación.

Esto, les permite reservar el líquido durante tiempos prolongados, por lo que están preparadas para sobrevivir a períodos de sequía. Lo que se convierte en una ventaja si eres una persona olvidadiza.

El agua que almacenan, en particular en sus hojas carnosas, la transforman en un jugo mucilaginoso que les permite sobrevivir en condiciones de extrema aridez.

Con esta capacidad de adaptación a climas áridos y secos, colonizan rápidamente este tipo de lugares.

Incluso, por la poca humedad que hay en algunas zonas, existen suculentas que son pubescentes, es decir que cuentan con una especie de pelillos que retienen el rocío de la mañana.

Asimismo, otra forma de adaptación que emplean consiste en limitar el número de ramificaciones y la longitud de las mismas en relación al tamaño de la planta.

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¿Qué energías transmiten las suculentas?

Según detallan diversas teorías, las plantas en general colaboran a mantener equilibradas las energías de los ambientes, ya sea externos como internos.

Sea como sea, las suculentas como tantas otras plantas brindan a las personas sensación de bienestar, de estar en contacto con la naturaleza, y mejoran el estado de ánimo.

Las mismas mejoran la concentración y disminuyen el número de dolencias físicas.

Además, específicamente las suculentas son las plantas elegidas para atraer la energía de la abundancia, dado que las mismas son grandes acumuladoras de agua.

Por eso, la importancia de cuidarlas, ya que si las mismas se encuentran en mal estado se producirá el efecto contrario. Esto afectará no sólo a la parte emocional, sino también física, económica, y energética.

Como se ve, las plantas son más que simples objetos decorativos. De por sí, aunque a muchos se les olvide, son seres vivos y por lo tanto, hay que cuidarlos como corresponde.

Existen plantas para todo tipo de espacios, solo es cuestión de encontrar la adecuada y de brindarle los cuidados correspondientes.

Suculentas: cuidados y riego

Para el cuidado de las suculentas no es necesario tener conocimientos de botánica. Con tener en cuenta algunos consejos para sus cuidados será más que suficiente.

Y es que este tipo de plantas es elegida tanto por los expertos en jardinería y dedicados, como por las personas que se ausentan por algunos períodos de tiempo de los hogares y son un poco olvidadizas a la hora de regarlas.

Actualmente es un estilo que se puso de moda, ya que la mayoría son plantas chicas, aunque si están cómodas con el ambiente crecerán y se podrán traspasar de maceta o bien hacer otras plantas con ella.

Lo importante a considerar es que no todo es igual en la botánica. En el caso de las suculentas es preciso no caer en el error de tratarlas como el resto de las plantas que uno posee en el hogar.

Las mismas solo requieren buena iluminación y un riego no muy intenso. Por ejemplo, el cactus será necesario regarlo una vez por semana en épocas de mucho calor. Muchas de ellas darán flores en primavera.

Pero veamos a continuación algunos detalles a tener en cuenta:

Régimen seco- mojado

Esto está relacionado al tema del riego. Como se explicó anteriormente estas son plantas acostumbradas a estar por largos períodos sin agua, por lo tanto habrá que considerar este detalle.

Las mismas pueden captar humedad del ambiente y reservarla en tallo, hojas y raíces.

Por eso se recomienda utilizar el régimen seco-mojado consiste en regar las plantas pero, a diferencia del resto, esperar a que la tierra se encuentre seca, tanto en la superficie como en la base, para volver a hidratarla.

De lo contrario se le brindará más agua de la que requiere y se terminará ahogando. Para chequear que la tierra también se encuentre seca en la zona de las raíces, se puede clavar un palo o un cuchillo en la tierra y chequear que los mismos salgan secos.

Si la tierra se ve seca, pero al insertar el instrumento sale húmedo, será necesario seguir esperando para su riego, ya que la zona cercana a las raíces, y la más importante, continúa mojada.

Durante los meses de frío, no necesitarán más de un riego cada quince días mientras que en los meses de temperatura más alta se puede regar una vez por semana.

Exposición lumínica

Por pertenecer a lugares secos y áridos, las suculentas están acostumbradas a la luz solar y de hecho la buscan especialmente.

Sin embargo, es recomendable evitar la exposición directa al sol, en especial en los meses de verano, para que no se quemen ni se deshidraten.

Pero si, en caso que sean plantas de interior, lo ideal es dejarlas cerca a una ventana y donde el frío no sea un problema.

Una buena práctica será, en la medida de las posibilidades, ir girando la maceta para que la luz le de a todas las partes de la planta.

Drenaje de las macetas

Este es un punto muy importante para que la planta se adapte y viva lo suficientemente bien. Sin embargo es algo que no todo el mundo tiene en cuenta.

Además del poco riego y la buena iluminación, el drenaje es un factor clave. Por eso, cuando se adquiere una suculenta o bien se trasplanta es necesario corroborar que la maceta tenga hecho los suficientes agujeros en la base para que el agua excedente del riego filtre.

Y es que cuando la maceta no cuenta con el drenaje suficiente, al regarla, por más que se haga una vez por semana, todo el excedente de agua que la planta no requiere queda en la tierra, y por ende la raíz lo absorbe.

Esto producirá que la misma se ahogue o no oxigene bien. Por eso, para saber que la maceta es la correcta, se recomienda regar la suculenta y esperar que el agua filtre.

Si a los pocos minutos de regar el agua no filtra por debajo, será necesario realizarle más agujeros a la maceta.

Controlar su salud: cómo interpretar sus colores

En el caso de que la planta esté negra, es porque hay un exceso de agua. Sería importante cambiar la tierra por una seca, para que no siga absorbiendo agua.

Si la planta se observa marchita, quiere decir que se está secando y habrá que estar más atento al tema del riego.

En cambio, si el color de la planta se vuelve rojizo, esto puede estar vinculado a demasiada exposición del sol. Colocarla en la sombra por un tiempo será una buena decisión.

Por el contrario, si las hojas están agujereadas o aparecen manchas negras, se trata de alguna plaga u orugas que se están comiendo la planta. Será importante alejarlas del resto de las macetas y además tratarla con algún antiplaga.

Ya conoces cómo cuidar las plantas suculentas sin ser un experto en botánica. ¿Conocías estos consejos?¿Cuáles sumarías?

Fuente: Verdecora