Descubre cómo mantener tu jardín sano y libre de plagas esta primavera con prácticas sostenibles. Te damos consejos y técnicas ecológicas para cuidar tus plantas, arbustos y árboles en septiembre, y prepararlos para un verano pleno de vida.
Según los expertos, las plagas en esta estación del año aumentan a medida que suben las temperaturas. El calor ayuda a la reproducción de insectos y microorganismos, que pueden dañar plantas, arbustos y árboles. Mantener un jardín sano implica prepararse con prácticas sostenibles para controlar estas infestaciones de manera natural y respetuosa con el medio ambiente.
Te invitamos a conocer técnicas naturales y métodos respetuoso que te ayudarán a conservar tu jardín abundante y resistente a los parásitos nocivos. ¡Transforma tu espacio verde en un ecosistema armónico y disfruta de un jardín más hidratado y duradero!.
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6 prácticas sostenibles para evitar las plagas de primavera en tu jardín
- Plantas repelentes: incorpora plantas aromáticas como albahaca, romero, menta o lavanda. Estas hierbas actúan como repelentes naturales para insectos como mosquitos y pulgones.
- Atrae insectos beneficiosos: los insectos como mariquitas, abejas y libélulas son aliados que se alimentan de plagas. Puedes generar atracción plantando flores coloridas como caléndulas, margaritas y girasoles.
- Aceites y jabones naturales: usa soluciones caseras a base de jabón potásico o aceites esenciales (como el de neem) para rociar las plantas. Son efectivos para disuadir insectos sin afectar a la planta ni al suelo.
- Rotación de cultivos y asociaciones: cambia de lugar las plantas cada temporada y combina variedades compatibles. Así, confundirás a las plagas y mejorarás la salud de tu espacio verde.
- Control manual: observa tu jardín de manera regular y elimina a mano larvas, huevos o insectos pequeños antes de que se transformen en un conficto mayor. Esta práctica es específicamente útil con plagas como las orugas.
- Mantén la biodiversidad del suelo: agrega compost orgánico y cubre el suelo con hojas secas o corteza para conservarlo saludable y atraer organismos que controlan naturalmente a las pestes.