Dottie tenía planificado disfrutar una estadía junto a su hija en la Costa del Golfo, una preocupación para ambas era que no podía acceder caminando a la playa. Sin embargo, se dirigió con su silla de ruedas y allí se encontró con jóvenes especializados que le ofrecieron ayuda para dirigirse al lugar elegido.

¡Enhorabuena! Salvavidas que brindan su servicio en la División de Seguridad no lo dudaron. Enseguida socorrieron a la señora para que pueda hacer realidad sueño de visitar la maravillosa playa.

Los días transcurrieron plácidamente mientras ellas disfrutaban de momentos inolvidables permitiendo que su sueño se concretara. ¡Fueron unas extraordinarias vacaciones! Dottie sabia que contaba con la predisposición de los hombres a toda hora, solo tenía que comunicarse por teléfono y aguardar su llegada para que posibiliten entre todos, su aproximación a la playa.

De esta manera lo contaba Orange Beach Surf Rescue en su cuenta de Instagram: “Los salvavidas son servidores públicos y no podríamos estar más felices de ayudar a brindar este servicio. La Sra. Dottie Schneider nos visitó recientemente aquí en Orange Beach a la edad de 95 años con la esperanza de disfrutar de la playa, pero no pudo caminar por la arena sola”.

Los buenos comentarios no tardaron en llegar, algunos se pronunciaron de la siguiente manera: “¡Usted, caballero, es todo acto de clase! Gracias por su amabilidad” “¡Hermosa historia y gente! ¡Dios siempre abre un camino!” “Gracias por hacer un poco mejor este mundo”

¡Qué gran gesto! Esta historia demuestra que los pequeños detalles pueden llegar a ser magníficos e inexplicables. Sencillez, audacia y empatía podrían ser tres cualidades perfectas para describir a los guardavidas del Orange Beach Surf.

También te puede interesar: Así aprendemos los adultos: La experiencia gana a la teoría según este experto mundial

Emocionada Waterbury, expresó lo siguiente: “Estamos eternamente en deuda con los muchachos de Orange Beach Surf Rescue. Hicieron que mi madre se sintiera especial. No la hicieron sentir como si fuera una carga para nadie. Estos muchachos se ganaron sus alas por la forma en que trataron a mi mamá. Todos ellos se preocuparon genuinamente”.

¡Cuantas veces hallamos la grandeza en la sencillez y humildad! Las acciones se vuelven inmensas cuando se hacen con gran amor, transformando la realidad en una sonrisa y felicidad.

Y TU… ¿HAS RECIBIDO AYUDA Y ESE GESTO CAMBIÓ TU VIDA?