Muchas veces, una ventana que durante el invierno puede quedar todo el tiempo abierta para que entre luz, se vuelve una molestia en verano, cuando el sol es más fuerte. O tal vez acabas de mudarte y no habías pensado en la cortina de alguna de tus ventanas.

También puede ser que quieras utilizar cortinas para tapar alguna estantería o mueble. Pero quizás no sabes coser, o no tienes ganas de tomarte ese trabajo. 

Para todos estos casos, puedes aprender cómo realizar cortinas sin coser, ¡y decorar fácilmente tu hogar!

cortinas sin coser - cocina

El truco de estas cortinas es la friselina o fliselina, un material termo-adhesivo que se utiliza como entretela para dar cuerpo a dobladillos o para hacer apliques, pero que en unas cortinas livianas puede servir perfectamente para pegarlas y suplantar la costura. 

Materiales necesarios

Cortinas sin coser - materiales

- Tela estampada del color que te guste, del largo que quieres que tenga la cortina y un poco más de ancho (lo suficiente para poder fruncirla)

- Barras extensibles planas o un caño o tubo de cortina lo más fino posible.

- Friselina (se consigue en mercerías)

- Tijeras

- Plancha

Procedimiento

cortinas sin coser - pasos

1. En primer lugar, deberás cortar la tela con el tamaño de tu cortina, dejando más o menos excedente de ancho de acuerdo con qué tan fruncida quieres que quede. Lo ideal es dejarla lo más extendida posible para que sea liviana, de lo contrario la friselina podría no aguantar el peso.

cortinas sin coser - cómo pasar la varilla

2. El siguiente paso es marcar el dobladillo en el borde superior, por el que introducirás la barra para colgar tu cortina. Coloca el caño y mide qué anchura deberá tener el orificio libre para pasarla. Asegúrate de hacer el dobladillo un poco más grueso para que no quede muy ajustado. Marca el doblez con la plancha para que luego puedas guiarte.

3. Pega el dobladillo utilizando tiras de friselina por dentro, y planchando para fijarla. Debes tener la precaución de no estirar demasiado para que no se curve la tela con las pasadas.

cortinas sin coser - terminadas

4. Una vez que tengas hecho el dobladillo más importantes, haz unos dobladillos pequeños en los laterales y en el inferior de tu cortina, para darle un mejor acabado.

5. Pasa la varilla por dentro del dobladillo, ¡y listo!

Ya puedes colgar tu cortina y darle un nuevo aspecto a tus ambientes. Utilízala en las ventanas, o para cubrir un mueble.