El tráfico de barcos está matando a las especies de ballenas más amenazadas

Se ha determinado que el exceso de velocidad de los barcos está matando a una de las especies de ballenas más amenazadas. Se ha intentado regular la celeridad de las embarcaciones, pero es complicado hacer acatar esta orden.

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La ballena franca glacial (Eubalena glacialis)

Todos sabe que las ballenas son mamíferos acuáticos que han padecido la cacería humana desde hace siglos. En el caso de este tipo de cetáceo, fueron los balleneros del País Vasco quienes empezaron a capturarlas.

Por lo antes comentado, la ballena franca glacial ha sido conocida como la "ballena vasca". Durante los siglos XVI y XIX fue muy acosada, pasando a ser un animal que casi desaparece de los mares del planeta.

En la actualidad, se estima que apenas quedan unos 350 ejemplares en el mundo. Desde mediados del siglo XX, se prohibió su captura. Pero, aún es afectada por otros factores: contaminación e impactos con embarcaciones.

En 2008 se aprobaron las primeras regulaciones de velocidad en los barcos

Se buscó limitar la aceleración de los barcos, de modo que las ballenas pudiesen esquivarlos. Estos cetáceos son grandes, pesados, nadan con extrema parsimonia y no logran eludir los navíos que se mueven rápido.

Hay zonas de navegación que son llamadas "lentas", donde hay un límite de velocidad. Se trata de las aguas por donde se mueven estas ballenas. Pero, las estadísticas advierten que el 85% de los barcos irrespetan la velocidad permitida.

Los barcos con 65 pies de eslora, o más, son los más peligrosos para los cetáceos. Los golpes con los costados de los navíos, o las heridas causadas por las aspas del motor, dejan heridas en los cetáceos que les causan la muerte.

Pero, las noticias se agravan. También, acontece que los barcos están acelerando. Las velocidades son mayores que las de hace un par de décadas. Es decir, ahora son más dañinos los barcos para las ballenas.

Nueva solución: prohibir el tránsito de barcos en las zonas de ballenas

Ante la imposibilidad de hacer que los barcos respeten los límites de velocidad, ahora se postula la intención de cerrar zonas al paso de embarcaciones. Aquellos lugares que son propios de la ballena franca estarán vetados para los barcos.

Esta resolución ya ha levantado oposición entre las empresas de transporte marino, así como en los itinerarios de puertos. Pero, sería la única solución para lograr mantener la existencia de las pocas ballenas francas que quedan.

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¿Sabías de este problema con la velocidad de las embarcaciones? No hay modo en que los barcos respeten los límites de velocidad. Por eso, se esbozan soluciones más drásticas ante esta situación.

Fuente: La Vanguardia.