*Por Meri Castro para Greenpeace Argentina.
¿Qué tienen en común los Esteros del Iberá y la Bahía de Samborombón en Argentina; el Salar de Surire y el Estuario de Lenga en Chile y la laguna de la Cocha y la estrella fluvial del Inírida en Colombia?
La respuesta es simple: son todos humedales, ambientes llenos de vida que nacen donde la tierra y el agua se encuentran.
Hasta hace poco, los humedales no eran muy mencionados en la agenda de los medios. Para cuando llegaron a ser noticia lo hicieron por ser el blanco de incendios intencionados o protagonistas de inundaciones en los barrios que se construyen sobre ellos, y no mucho más.
Por eso, en esta nota queremos que veas imágenes de los humedales en todo su esplendor. Porque estas tierras, que se inundan de manera intermitente o permanente, son un espectáculo silvestre maravilloso que debemos conocer y cuidar cada vez más.
Humedales: una gran esponja que cuida el agua de todos
Los humedales están conectados con otros ambientes acuáticos. Esto les da un dinamismo particular que les permite tener una función de esponja, desacelerando el flujo del agua y regulando las inundaciones y las sequías.
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Cuando hablamos de defender a estos ecosistemas lo decimos no solo para preservar el hogar de cientos de especies animales y vegetales sino también porque de su existencia depende la calidad de vida de todos los seres que habitamos el planeta.
Son tan importante porque cumplen todas estas funciones:
- Abastecen de agua dulce
- Controlan las crecidas y recargan aguas subterráneas
- Estabilizan las costas y protegen a las comunidades de las catástrofes
- Retienen y exportan sedimentos y nutrientes
- Absorben contaminantes y depuran las aguas
Y añadimos otro dato importante: los humedales regulan el clima y almacenan el doble de CO2 que todos los bosques del planeta.
Sin embargo, no queremos que la supervivencia de este ambiente dependa solo de lo que llaman “servicios ambientales” porque debemos de dejar de pensar a la naturaleza como un reservorio de recursos a disposición de la humanidad.
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