Efemérides Colombia: estamos a un año del fenómeno de El Niño, cuando se comenzaron a sentir los efectos del acontecimiento ambiental, particularmente intenso, que tuvo un impacto devastador en varias regiones del país.

El suceso de El Niño es un patrón climático que se caracteriza por el calentamiento anómalo de las aguas del océano Pacífico, lo que afecta el clima global, causando sequías en algunas regiones y lluvias intensas en otras.

En específico, el Niño ocurre cuando los vientos alisios, que normalmente soplan de este a oeste sobre el mar pacífico, se debilitan o incluso cambian de dirección. Esto posibilita que sus aguas cálidas occidentales se desplacen hacia el este, lo que aumenta la temperatura de las aguas en la zona central y oriental del océano. Este cambio afecta los patrones climáticos, alterando la distribución de la temperatura en la atmósfera y afectando la circulación atmosférica global.

Foto: El Pais
Foto: El Pais

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Impacto en Colombia

  • Sequías severas: las altas temperaturas y la falta de lluvias provocaron una sequía severa, especialmente en las zonas del Cundinamarca, Santander y Boyacá, departamentos que dependen en gran medida de las lluvias para la agricultura y el abastecimiento de agua. Estas sequías afectaron cultivos clave como el maíz, la papa y el café, provocando pérdidas económicas significativas para los agricultores.

  • Incendios forestales: las condiciones de sequedad y el calor extremo crearon un ambiente propicio para la propagación de incendios forestales. Estos incendios arrasaron miles de hectáreas de bosques en diversas zonas del país, destruyendo ecosistemas y poniendo en peligro la biodiversidad local. La región del Eje Cafetero, que incluye a departamentos como Caldas y Quindío, también fue fuertemente afectada.

  • Desplazamiento de comunidades: los incendios y la falta de agua llevaron al desplazamiento de comunidades rurales, que se vieron obligadas a abandonar sus hogares debido a la pérdida de sus tierras, la escasez de recursos y la amenaza de los incendios. En muchas áreas, las personas se vieron forzadas a migrar hacia las zonas urbanas en busca de asistencia humanitaria y mejores condiciones de vida.
  • Emergencia sanitaria y de recursos: además de los efectos en la agricultura y el medio ambiente, la sequía también afectó los recursos hídricos del país, ya que muchos ríos y embalses experimentaron bajos niveles de agua. Esto generó una crisis en el suministro de agua potable para diversas ciudades y zonas rurales. Las autoridades locales y nacionales tuvieron que implementar planes de racionamiento de agua y activar medidas de emergencia.

Respuesta del gobierno y las autoridades:

El gobierno colombiano, junto con organizaciones internacionales y ONG, declaró zonas de emergencia en los departamentos más afectados.

Se realizaron esfuerzos para contener los incendios y se brindó apoyo a las comunidades desplazadas. Además, se pusieron en marcha programas de reforestación y restauración ecológica, aunque la magnitud de los daños hizo que la recuperación fuera un proceso lento y costoso.

Preocupación por el cambio climático

Este episodio de El Niño en Colombia también provocó una mayor preocupación por el efecto del cambio climático en el territorio. Se reconoce que eventos como estos son cada vez más fuertes y frecuentes debido al calentamiento global, lo que hace que la nació colombiana, de gran biodiversidad y numerosos ecosistemas, esté más vulnerable a catástrofes naturales.