En el transcurso de los días se viralizó el testimonio de Marlene Engelhorn. Tiene 29 años y es descendiente de los fundadores de la empresa química Badische Anilin-und Soda-Fabrik (BASF). La compañía es una de las mayores del mundo.
¡Sus ingresos han superado los más de 78.000 millones de dólares!
Tal como anunciaron, su abuelo Friedrich Engelhorn, dejó la compañía en 1883 e invirtió su dinero en la farmacéutica Boehringer Mannheim. Luego su nieto Curt condujo la firma hasta 1997, antes de vender el grupo a la suiza Hoffmann-La Roche por 11.000 millones de dólares.
Rechazó el 90% de la parte que le toca por herencia y se volvió viral
¿Sabías que Marlene es una fiel defensora de la justicia social? Estudia Lengua y Literatura alemana en Viena y está convencida de que no necesita tanto dinero. Considera que la suma de dinero le traería tensiones, problemas y malos entendidos. “No podría ser feliz”, confesó.
En exclusiva para medios alemanes y austríacos la austriaca reafirmó: "Gestionar ese patrimonio conlleva mucho tiempo. No es ese mi proyecto de vida. No es que no quiera ser rica, es que no quiero ser tan rica", reconoció.
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En línea con lo expresado, cabe mencionar que años atrás junto a otros 49 herederos de multimillonarios, fundó la iniciativa Taxmenow, también conocida como AG Steuersrechtigkeit, un movimiento que ha mutado por toda Europa.
“Como alguien que ha disfrutado de los beneficios de la riqueza toda mi vida, sé lo sesgada que está nuestra economía y no puedo seguir sentada y esperando que alguien, en algún lugar, haga algo”, afirmó a la BBC.
En ese sentido decidió liderar diferentes movimientos sociales. Sostiene que debe haber una mayor redistribución de la riqueza y que aquellos que más dinero poseen tiene que pagar más impuestos.
Y puntualizó en lo siguiente: “No debería ser mi decisión qué hacer con el dinero de mi familia, por el cual no trabajé yo. No se trata de una cuestión de voluntad, sino de equidad. No he hecho nada para recibir este legado. Esto es pura suerte en la lotería del nacimiento y pura coincidencia”.
En definitiva, Marlene está muy segura y convencida de la decisión que ha tomado: renunciar a una fortuna que supera los U$S 4000 millones. Y entonces… ¿Qué propone la joven? Declaró que el Estado debe hacerse cargo.
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