Parte de esta búsqueda de autoaprendizaje en materia de sostenibilidad provoca que coincidamos en foros, talleres, protestas y demás convocatorias ambientalistas que, con la llegada de la era digital, pudieron potenciarse. Así pudimos presenciar la verdadera fuerza de una minoría que busca ser la mayoría global.
Incluso tú, mientras lees estas líneas, estás en búsqueda de una manera más sostenible de vivir y es grandioso sentir que no estás solo en éste camino.
Por ello es que una vez que localizamos estas coincidencias, es vital la integración social de diferentes actores, no solo en foros y comunidades digitales, sino también en proyectos urbanos y de asentamientos humanos en general.
Y es así que nace la idea de Ciudades y Comunidades Sostenibles como espacios que respetan principios básicos para su creación y operación buscando ser los cimientos de un futuro en el que cada rincón del planeta comparta dicha misión.
¿cómo se puede alcanzar una comunidad Sostenible?
Las maneras de lograr que una comunidad sea sostenible son muchas: desde los materiales para su construcción, la integración de la naturaleza y sobre todo su funcionalidad efectiva, hasta el cómo opera en su totalidad, el manejo de recursos y residuos dentro y fuera de sus áreas públicas o privadas.
Pero esto no es solo para proyectos a futuro, si no que cualquier espacio que sea parte de una comunidad ya establecida o en crecimiento, puede adaptar medidas para lograr este objetivo.
Una manera de empezar con esta integración de un camino a la sostenibilidad, es la separación de residuos en áreas públicas con la instalación de contenedores destinados para el correcto manejo de éstos.
Existen empresas que se dedican a fabricar éste tipo de contenedores de un material llamado "madera plástica", que utilizan al plástico reciclado como materia prima para su producción. De este modo, se trata de un producto doblemente sustentable.
Estos contenedores no solo favorecen la separación de residuos de manera efectiva, sino que, por el material con el que son producidos, también permiten ver de primera mano el resultado final del proceso del reciclaje.
acciones que contagian
Además, funciona no solo para los que ya compartimos esta ideología, sino también para los que aún no la conocen o han estado al margen de acciones en sus vidas que ayuden a revertir los estragos del cambio climático.
Al ver que parte de la comunidad está mejorando en sus acciones diarias, estos individuos se motivan a intentarlo también. Además, con medidas tan simples como la inclusión de separadores de residuos, su tarea se ve enormemente facilitada, al contar con los medios para lograr ese cambio a nivel personal o familiar.
Si logras que una persona comience a separar lo que consume, habrás cambiado al mundo. No solo porque esta persona va separar, si no que te habrás hecho de un aliado en vigilar el correcto uso de éstos contenedores y con ello podrás empezar una nueva comunidad sostenible dentro del espacio que compartes ya sea público o privado.
Existen muchas personas que cuentan con la intención o voluntad de hacerlo, pero el ritmo de la vida diaria y la poca inclusión de gobiernos o programas sociales adecuados impiden la realización de esta misión.