Un polémico sistema de clasificación de alimentos se ha aprobado en España, y se implementería en 2019. Pero no está excento de polémicas.
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En España, esta semana el Ministerio de Sanidad anunció que va a aplicar el sistema NutriScore, un etiquetado frontal de alimentos (FOP) que viene utilizándose en Francia desde hace un año, con resultados positivos avalados por las sociedades científicas, las asociaciones de consumidores y la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El sistema empezaría a implementarse en 2019.
Nutriscore
El sistema consiste en una escala de cinco colores que van del verde (mejor calidad nutricional) al rojo. Estos colores están asociados a cinco letras (A/B/C/D/E) que hacen que el código sea más sencillo de leer. El círculo de mayor tamaño es el que indica la calidad nutricional del alimento. Por la escala de colores, lo llaman "semáforo".
La polémica
Distintas ONGs dedicadas a la salud y la nutrición empezaron a evaluar estas etiquetas y encontraron que, por ejemplo, la Coca-Cola Zero tiene la letra B (verde claro, es decir, un notable). En cambio, al aceite de oliva, se le asigna la letra D.
La nutricionista Marián Garcia declaró a La Vanguardia que “Está pensada para valorar aceites con aceites y refrescos con refrescos. Si examinas una cola normal, seguramente estará en la E, si tomas una zero, será una mejor opción, por lo tanto. No se pueden tomar las valoraciones de NutriScore para comparar yogures y cereales, aceites con refrescos o magdalenas con pizzas”.
La experta agrega que, aunque para algunos, NutriScore puede tener efectos muy positivos, algunos estudios muestran que genera una mejora nutricional de 9,3% de la media de las cesta de la compra de los participantes.
Sin embargo, otros expertos creen que al usar el mismo sistema, los consumidores pueden tender a comparar de manera incorrecta, y terminar perjudicandose.
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