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En los tiempos en que vivimos, alejarnos de las aglomeraciones y buscar nuevas formas de moverse que sean amigables con el ambiente ya es toda una tendencia consolidada. Por esto, la bicicleta es una de las estrellas imbatibles pero... ¿Pensaste alguna vez en los rollers también como una alternativa eco-friendly?
El patinaje es un ejercicio aeróbico muy completo: trabajará tu cuerpo desde la punta de tus pies hasta los hombros. Mejora la coordinación motriz, el equilibrio y la concentración, entre algunos de sus beneficios.
La libertad de poner tus rollers en una mochila y llevarlos a donde tu quieras hace que sea una forma de moverse más que accesible, fácil y práctica para recorrer tu ciudad. Y sin depender de los clásicos medios de transporte como el colectivo o el auto. ¡Una vez que aprendes a patinar no querrás bajarte de los rollers ni un minuto!
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¿Por qué elegir subirte a los rollers?
1 - Mente relajada, cuerpo contento: hacer este ejercicio mejora el estado de tu ánimo y si estás con un día que te sientes un poco apagado, salir a “rollear” cambiará definitivamente tu humor. Las endorfinas se liberan rápido cuando se trata de andar en patines.
2 - Bajarás de peso sin ir al gimnasio: no dependerás de pesas o rutinas repetitivas de alta intensidad ya que salir en rollers quema entre 300 y 600 calorías en tan solo 30 minutos. Lo ideal es practicarlo con una frecuencia de 3 veces por semana con una duración de 45 minutos por sesión.
3- Articulaciones y huesos sin lesiones: patinar es un ejercicio de bajo impacto a diferencia de otros como el running, dañarás menos tu cuerpo sin causar desgastes.
4 - Un corazón súper en forma y entrenado: este músculo se activa mejorando tu circulación y la capacidad de oxigenación de tus pulmones. Además, el patinaje aumenta los niveles de HDL (el colesterol “bueno”) y reduce el riesgo de posibles infartos. ¡A más velocidad, más pondrás a prueba tu sistema cardiopulmonar!
5 - Tonifica integralmente todos los músculos: sobre tus rollers fortalecerás piernas, aductores, glúteos (por la extensión y la abducción de la cadera), abdominales, espalda y brazos.
¿Qué tener en cuenta para arrancar?
Para empezar este kit será imprescindible: unos buenos patines, contar con un apto físico para realizar el ejercicio y equiparte con los accesorios adecuados. Estos son: rodilleras, casco, muñequeras y cualquier otra protección para que si te caes... ¡te vuelvas a levantar y a seguir rolleando!
En cuanto a la alimentación, si harás la práctica por la mañana mejor desayuna 1 hora antes, preferentemente con frutas que te den energía e infusiones. Y como cualquier ejercicio, es recomendable dormir entre 7 y 8 horas la noche anterior a hacerlo.
Evaluar dónde vas a patinar: ¿el terreno tiene relieves? ¿Tiene piedras, palos sueltos o pozos? Pueden parecer preguntas obvias pero te aseguran que caerte no será el primer atajo que tomes arriba de los patines. Tampoco está de más, practicar qué modalidad de freno es la que te queda más cómoda para estar preparado ante cualquier imprevisto. Con toda esta guía, ya estarás listo para subirte a los rollers.
