En su libro expone que los monos juegan con coches y las monas con muñecas. Quizás, se trata de la lección primate sobre el género, un tema que está en boga en nuestra época, mismo que genera muy duras controversias.
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Frans de Waal, una eminencia en el estudio de los primates
De nacionalidad holandesa, nace en 1948. Desde hace décadas, se aboca a la observación de los primates con enfoque científico. Su más reciente libro se llama “Diferentes. Lo que nos enseñan los primates sobre el género” (2022).
Su libro mira la manera en que simios, chimpancés y otros primates asumen la cuestión de género. Sobre todo, durante la crianza y desarrollo. Es así como se ha dado cuenta de que los géneros tienen cierta predisposición natural.
Este asunto es bastante álgido, sobre todo en una época donde muchas personas se han declarado no binarias. Más cuando los resultados del estudio de Frans de Wall apuntan a una postura conservadora respecto al tema.
¿Cuáles son los resultados expuestos en el libro?
Se describen resultados de observaciones en chimpancés, dando por sentado que los machos y hembras se comportan de manera diferente por cuenta propia. No tienen conductas de género inducidas por educación.
- En una camada de chimpancés, se repartieron peluches y muñecas. Los pequeños primates empezaron a usar esos objetos para jugar.
- Las hembras, de manera natural, tendieron a cuidar y proteger estos juguetes.
- Los machos, en cambio, se fastidiaron y empezaron a romper las muñecas. También, arrojaban los peluches y los usaban para golpearse entre sí.
- Otro experimento: se usaron juguetes como patinetas y cosas con ruedas. ¿Qué hicieron las hembras? No prestaban mucha atención, solo las guardaban o solo las ignoraban.
- ¿Y qué hicieron los machos con los juguetes provistos de ruedas? Pues, al notar que los podía rodar se emocionaron. Rodaban sobre las patinetas, o movían con sus manos las ruedas sobre varias superficies.
Este resultado terminó mostrando lo que en algunos círculos progresistas llaman estereotipos, pero el asunto es que no fueron comportamientos inculcados. Los primates machos jugaban con coches y las hembras con muñecas.
Una explicación a los resultados de la observación de primates
Las hembras muestran con muñecas y peluches el deseo de cuidar, del mismo modo en que siendo adultas lo harían con una cría. Lo machos no muestran ese mismo instinto, por lo que prefieren juguetes de otra índole.
Suena a estereotipo, pero responde a tendencias naturales. A su vez, los machos son más agresivos que las hembras… excepto en una situación. Cuando una hembra ve que su cría está en peligro, su reacción es visceral.
Si otro primate, o cualquier animal, ataca a los descendientes de una hembra, ella reacciona con bastante agresividad. No se detiene ni se mide, llegando incluso a despertar y doblegar a un macho de mayor tamaño.
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¿Qué te parecen los resultados de estos estudios? El libro del destacado científico Frans de Waal se entrevera en un tópico que en nuestra época es delicado. Pero él desea ver la cuestión de género en plena naturaleza.
Fuente:
EL CONFIDENCIAL