Consejos para enfrentar el miedo al volante y conducir con total confianza

Muchas personas que deciden empezar a conducir experimentan miedo al salir a la vía pública. Se sienten incapaces de reaccionar ante el tráfico y se paralizan. Uno de los factores que juega un rol importante es el estrés, que también nos puede generar miedo al volante. Se da en casos de personas que comienzan a desistir de conducir su coche y prefieren el transporte público, sin una aparente razón.

La fobia a conducir un automóvil también es conocida como amaxofobia. Se presenta como un miedo irracional y es uno de los trastornos de ansiedad más frecuentes que presenta el ser humano. Es un temor irracional, exagerado, ante determinados objetos que normalmente no producirían ese tipo de respuestas.

Usualmente, las personas que están en esta situación sienten la incomprensión por parte de su entorno, y les resulta muy difícil explicar la ansiedad y el miedo que padecen. Esto sucede porque la mayoría de las personas que rodean a quien sufre esta fobia sugieren que solo es cuestión de
subirse al auto sin entender que es mucho más que eso. En consecuencia, surge el aislamiento y se oculta el miedo.

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¿Conoces a alguien a quien le pase esto? Si es así, ten en cuenta estos consejos para enfrentar el miedo al volante y manejar con total confianza.

¿Cómo vencer el miedo y enfrentar la fobia?

Lo primero es distinguir hasta qué punto el miedo a enfrentarnos a la vía y al volante es algo controlable, y cuándo es un miedo irracional que no somos capaces de frenar. Si se trata de una fobia, es necesario acudir a un especialista.

Debes buscar alguien que te pueda brindar herramientas que te sirvan para manejar eficazmente las señales fisiológicas que se te presenten (ahogo, sudoración, temblor o taquicardia) y que son muestras de ansiedad. Alguien que ofrezca un entrenamiento progresivo de manera que puedas adquirir mayor confianza.

Pero también debes saber que conocer esas herramientas no alcanza para superar el miedo que provoca manejar. Es necesario enfrentarse a ese miedo con práctica en el tránsito real. Teoría y práctica deben ir de la mano. De ese modo, la conducción se podrá convertir en una operación más relajada.

¿Qué debemos evitar al intentar manejar?

El proceso arranca con la identificación de esta dificultad en cada persona, cómo se manifiesta, en
qué nivel de su ansiedad está. Una vez determinado esto, comenzará el trabajo. La amaxofobia se trata en tres niveles:

a) Los pensamientos anticipatorios.
b) Las técnicas que permiten controlar las reacciones fisiológicas.
c) Una programación de enfrentamiento con las situaciones que provocan el síntoma.

Quien esté en ese proceso pautado y ya manejando esas ansiedades, debe evitar llegar al punto crítico donde aparece el displacer. Quedarse en los éxitos provisorios: dar una vuelta a la manzana, realizar un recorrido conocido, armar rutinas hasta que se afiance el desempeño.

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¿Qué se aconseja para ganar confianza en el manejo?

1. Imaginar que no está tan lejana la posibilidad de la conducción.

2. Detenerse en el momento donde se presenta la ansiedad.

3. Rodearse de acompañantes cómplices, que sumen correcciones sin desalentar y registre los avances (que los habrá, si se insiste en circular hasta obtener la confianza necesaria).

4. Pensar en positivo y actuar en consecuencia.

¿Qué debemos saber para sentir que ya estamos seguros?

Cuando hayan desaparecido estas sensaciones catastróficas, como que tu vida o la de los demás
están en peligro, sensaciones tan incómodas que te llevan a pensar que vas a tener un accidente,
que vas a chocar, que por tus acciones alguien saldrá lastimado, cuando parte de esto se haya
desactivado, entonces verás que podrás imaginarte como conductor.

Tips para superar el miedo al manejo

- Superar la dependencia que provoca el miedo a conducir requiere de un gran trabajo mental, por eso es importante desearlo realmente.

- Al detectar esa imposibilidad, es necesario contar con la colaboración de alguien, ya sea que decidas superar esta fobia con la ayuda de un profesional o de un especialista en la enseñanza de la conducción.

- Determinar el origen de tu miedo.

- Hacer el ejercicio de conocer de dónde viene podría ayudarte a encontrar la solución más rápido.

- Comenzar a dar pequeños pasos conduciendo bajo supervisión por una zona calma, de bajo tránsito, que te permita reforzar tu seguridad y acostumbrarte a controlar el volante y la situación.

- A medida que enfrentes tus miedos y vayas ganando confianza conseguirás superarlo y tener capacidad de conducir sin ayuda.

- Si sientes que tu miedo es incontrolable y que sufres ataques de pánico entonces lo mejor es que
acudas directamente a la ayuda profesional, pero recuerda que gran parte del éxito en superar tu
miedo a conducir depende de vos y tus deseos.