Así es como se puede calcular el éxito de una relación afectiva

El autor de The Mathematics of Love (La matemática del amor), el psicólogo John Gottman, ha demostrado con la ayuda del matemático James Murray, que la matemática pueden ayudar a entender el amor.

La pareja de especialistas creó un modelo que mide la influencia e interacción que ocurre en las conversaciones o discusiones de una pareja.

¿Cómo es posible? ¿Puede algo tan racional y metódico como las matemáticas servir de modelo para algo tan impredecible como el amor?

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Gottman recolectó las respuestas de más de 40 mil parejas que atendió en su terapia que señalaban fortalezas y debilidades de cada una. Además, obtuvo información emocional mediante otros indicios como expresiones del rostro, tonos de voz y signos de comportamiento.

Junto con su esposa, Gottman fue pionero en señalar que una relación afectiva también podía estudiarse con mediciones psicofisiológicas, análisis de las microexpresiones, reacciones emocionales, lenguaje no verbal y entrevistas clásicas. Esos datos son la base del modelo que crearon los especialistas, capaz de identificar patrones en las parejas y proyectar cuál sería el "éxito" de cada relación.

Según indican, por ejemplo, las parejas que desarrollan más interacciones positivas tienen un bajo riesgo de separarse. Aquellas que, por el contrario, presentan un riesgo mayor son las que despliegan interacciones negativas.

Según Gottman, el desprecio, las críticas constantes, estar a la defensiva reiteradamente y la indiferencia, pueden llevar a una ruptura en la pareja.

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Una pareja andando en bicileta en un día soleado

Más allá de este modelo, que le ha permitido al psicólogo dar con dinámicas de pareja e indicar el impacto de las discusiones en su futuro, Gottman sigue señalando que para lograr el éxito en la pareja las claves son mantener el cariño y la admiración más allá de cualquier diferencia o problema. Siempre habrá conflictos, la clave es saber gestionarlas y verlas no como amenazas, sino como oportunidades de crecimiento.

En síntesis, se trata de desarrollar y cultivar: