La mujer en la industria arma su espacio con perspectiva de género
Una representación del Departamento de Mujeres Empresarias de la Unión Industrial de la provincia de Buenos Aires cuentan sus experiencias, logros y desafíos a lo largo de cuatro años de existencia
Autoridades del Departamento de Mujeres Empresarias de la Unión Industrial de la provincia de Buenos Aires (Uipba) dialogaron con NOTICIAS POSITIVAS: su presidente, Mariana Perea, su secretaria, Alejandra Beligoy y Patricia Malnati, integrante del departamento de Ambiente y Sustentabilidad, las tres empresarias compartieron sus logros y desafíos.
“Había muchos datos de violencia de género, pero nada de mujeres en la industria. Esta encuesta que hicimos devela la necesidad de capacitación y financiamiento para la mujer en la industria con perspectiva de género. Porque lo que se ofrece tiene que ver con el estereotipo de lo que se cree que somos y no lo que realmente necesitamos. Por eso hay que participar”, expresan.
La pandemia no detiene las iniciativas solidarias de Monte Adentro, en el norte chaqueño
La provincia del Chaco es una de las áreas más afectadas por la pandemia de Covid-19 en la Argentina. El virus afecta a todos por igual, pero, sobre todo, impacta en las comunidades rurales que históricamente viven aisladas por falta de oportunidades. En la zona del norte chaqueño, la ONG Monte Adentro sostiene más de 50 programas que se llevan adelante con más de 25 trabajadores.
Sin embargo, al comienzo de la cuarentena, las familias de la región quedaron aún más aisladas, porque los programas que la organización llevaba adelante se suspendieron. Luego de varias semanas y cuando la situación de cuarentena se flexibilizó, Monte Adentro visitó a las familias para asegurarse de que estuvieran bien y que tuvieran todo lo necesario en el contexto de la pandemia.
«Fuimos testigos de la fuerza de voluntad y autogestión de las familias que acompañamos desde hace cuatro años: ellas mismas empezaron a organizarse para continuar con los programas que llevamos adelante, respetando los protocolos correspondientes», cuenta Juan Chalbaud, cofundador y director general de Monte Adentro, y agrega: “El Impenetrable está desapareciendo. Todo el monte chaqueño está desapareciendo. No estamos llegando a tiempo y no existe otro Impenetrable en el mundo”.
El último río volador y por qué es estratégico protegerlo, de la mano de las comunidades indígenas
La Amazonía, dentro de sus diversas funciones ambientales (como el stock de carbono, entre otras), es la principal fuente de recursos hídricos de América Latina. Sus “ríos voladores”, que vuelan a más de dos kilómetros de altura, son el producto de la capacidad de los árboles de la Amazonía de lanzar agua a través de la evaporación y transportan vapor de agua desde el océano Atlántico a toda la región: son miles de millones de árboles en el bioma amazónico que funcionan como megabombas de agua.
Cruzan la atmósfera sobre el Amazonas a velocidades vertiginosas, transportando más agua incluso que el propio río en tierra, y originan lluvias a miles de kilómetros de distancia, llegando hasta el sur de Brasil, Uruguay, Paraguay y norte de la Argentina.
El 70 por ciento del PBI de América Latina depende de manera directa de estos ríos voladores amazónicos, lo que se traduce en una función ambiental estratégica para la seguridad económica, humana, agrícola, energética, y ambiental, de todo el planeta y el continente. Entre un 15 % y un 25 % de las lluvias de la Mesopotamia y de los Andes se producen gracias a estos ríos voladores amazónicos.
Hay quienes ya hablan del «último río volador» debido a que de las tres partes de la Amazonía hay dos ya deforestadas y por lo tanto débiles: la parte sur (que provoca la falta de agua en San Pablo, por ejemplo); la parte central que está muy presionada y es un desafío sostener, y finalmente la parte norte, que es todavía la esperanza y la oportunidad de conservación.