Al llegar a la Escuela Primaria Pública 18 de Marzo, en Kanasín, Yucatán, Lázaro, un perrito callejero, se encontró con una sorpresa inesperada que transformaría su existencia de manera definitiva. A partir de ese momento, se sumergió en un ambicioso proyecto. Su propósito era fomentar la conciencia sobre los derechos y el bienestar de los animales, al mismo tiempo que exponía los numerosos actos de crueldad que se habían documentado en el país.

Este canino, de una mezcla de razas variadas, había pasado su vida en las calles de esa localidad. Cuando los profesores y estudiantes de la escuela lo acogieron, su estado era alarmante: desnutrido, con una cadera dislocada y una pata fracturada. Por este motivo, decidieron llevarlo al veterinario, con la intención inicial de sanarlo y encontrarle un nuevo hogar. Sin embargo, una vez que se recuperó, cambiaron de parecer y optaron por adoptarlo ellos mismos.

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En la actualidad, es habitual verlo "asistiendo" a clases dentro de las aulas de la escuela. Recibe alegremente a todos los alumnos en la entrada, quienes le brindan el amor que tanto requiere.

Fue la maestra Julie Ceballos quien propuso a la dirección de la escuela la idea de acoger a Lázaro. Una vez que el perro se recuperó por completo de sus heridas, se sometió a una intervención de esterilización y la Escuela Primaria 18 de Marzo se convirtió en su nuevo hogar.

Durante una entrevista para el noticiero local de TV Azteca Yucatán, Julie relató cómo Lázaro llegó a la escuela en un día lluvioso, con diversas heridas en su cuerpo. Sensibilizados por su situación, decidieron brindarle ayuda. "Estaba extremadamente delgado, su cuerpo era pura piel y huesos. Hemos sido testigos de la transformación de Lázaro. Los niños han contribuido en su recuperación al traerle croquetas, agua y cuidándolo con esmero", explicó la educadora.

Las imágenes compartidas en las redes sociales muestran a un Lázaro notablemente recuperado. Su estado físico ha mejorado considerablemente, ya no se aprecian los rastros de sus huesos en su piel, ha comenzado a ganar masa muscular y su rostro muestra una sonrisa radiante cuando interactúa con los alumnos.

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“Nos ve Lázaro y viene corriendo, nos abraza, está con nosotros, creo que de verdad no se le olvida que de lo rescatamos, lo cuidamos,” comentó Elvira Padilla, directora de la escuela primaria.

El "Proyecto Lazarito" fue presentado ante Somos el Cambio, una fundación mexicana que promueve la resolución de los problemas que aquejan al país. Mediante esta iniciativa, la comunidad de la Escuela Primaria 18 de Marzo tenía como objetivo concienciar y resaltar la importancia de la tenencia responsable de mascotas.

Este proyecto se destacó entre más de 800 propuestas, y contó con la colaboración de la Clínica Veterinaria El Divino Niño y Planned Pethood México, quienes se unieron a las autoridades para brindar su apoyo a Lázaro, y a los niños, padres de familia y a los habitantes del municipio en cuanto al valor invaluable de las mascotas en la sociedad.

Fuente: Infobae.