Carrera por el cobalto: ¿sabías que tu móvil procede de la esclavitud?

Así como, alguna vez, existió una “fiebre del oro”, ahora se habla de la “carrera por el cobalto”. Una situación donde se repite la existencia de verdaderos esclavos, quienes trabajan en el Congo para que tú puedas estar conectado.

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El cobalto: ¿por qué se ha vuelto tan importante?

Este material es un elemento puro, cuyo símbolo en la tabla periódica de los elementos químicos es “Co”. Su aspecto es metálico y de color azulado, siendo un poco extraño, pero que es muy útil para las actuales baterías recargables de iones de litio.

También, se emplea en muchos componentes electrónicos. Vivimos una época tecnológica, con ordenadores y móviles, con cámaras digitales y muchos aparatos que usan baterías electrónicas que requieren cobalto para su funcionamiento.

Muchas empresas pagan altas cantidades por el cobalto. Compañías de Asia, de Europa, Norteamérica o la India… es así como una nación como el Congo, con grandes reservas de este metal, se convierten en foco de la “carrera por el cobalto”.

Katanga: la región del planeta con las mayores reservas de cobalto del planeta

Este territorio se extiende en la geografía sudoriental del Congo. Su reserva de metales abarca, también, riquezas subterráneas de cobre, zinc, estaño o niquel… todos insumos electrónicos. El Congo se convierte así en una mina de pertrechos para la tecnología.

Con el auge de los teléfonos móviles, el cobalto acaparó una notoriedad que antes desposeía. Los móviles, tablets, laptops y todos los artilugios con baterías gozan de mucha demanda y son la cantera de un negocio de mayúsculos capitales.

Se levante así el telón de un apremio por el cobalto, con el apéndice de que es un material raro, poco frecuente. El otro ingrediente es la precaria situación económica de un país como el Congo, cuyos ciudadanos son explotados a trueque de bagatelas.

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La esclavitud por el cobalto: ¡el precio de la tecnología!

Con golpes de pecho, occidente se jacta de rechazar la esclavitud. Desde la Revolución Francesa, la libertad se ondea como derecho de todos los seres humanos. Pero, en el mundo actual aún afloran reductos esclavistas.

La realidad del Congo tiene una venda en los ojos y la boca tapada por la mano de la censura. Pero, recientes noticias han ventilado la muerte, en las minas de cobalto, de muchas personas debido a accidentes y deficientes condiciones laborales.

Y estas muertes alentaron la curiosidad por saber lo que sucedía. Se supo entonces que muchos niños trabajaban en las minas de cobalto. Una explotación infantil sumada a sueldos vejatorios y horarios de trabajo inhumanos.

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¿Qué han dicho las empresas tecnológicas sobre la realidad en el Congo? Apple comunicó en sus redes que “sus fundiciones no compran cobalto proveniente de prácticas negativas”. Samsung explicó que “su abastecimiento respeta normas internacionales”.

Fuente: El País.