Vivimos rodeados de estímulos permanentes: publicidades, información, propuestas, consejos, opiniones, etc. De acuerdo con algunos estudios, recibimos cinco veces más información que la que llegaba a nosotros tan solo 20 años atrás. Pero, ¿cómo hacer para evitar que todo eso nos termine nublando la mirada?
La única respuesta está dentro de cada uno, en la propia intuición. Nuestra inteligencia intuitiva natural puede ayudarnos a descartar lo que no se alinea con nosotros y así ayudarnos a elegir mejor.
Pero para desarrollar la intuición también debemos aprender a confiar en ella y a registrar su lenguaje sutil. Aquí te contaremos cuáles son los cuatro niveles de intuición y cómo aprender a reconocerlos.
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Nivel 1: estómago
Todos hemos sentido alguna vez este nivel de intuición. Se refiere a algo simple y básico que nos comunica que una situación o vínculo está bien o no a través de una sensación física de placer o displacer. Hay algo que percibimos en nuestro estómago, o en lo más profundo de nuestro cuerpo y que de alguna forma nos dice: "sí, es por aquí, es seguro" o, por el contrario: "¡corre!". Muchas veces desoímos esta señal pero escucharla puede ayudarnos a elegir con sinceridad lo que realmente nos hará bien. Tenemos esta inteligencia emocional, solo debemos aprender a darle lugar.
Nivel 2: corazón
Este nivel de la intuición nos comunica con los demás y con todo a nuestro alrededor desde la lógica del amor y la compasión. Podemos sentir y conectarnos con los otros, más allá de todo lo que racionalmente nos separaría, y de una forma que muchas veces no puede explicarse con palabras. Es eso que sentimos cuando miramos a otra persona a los ojos, cuando nos damos la posibilidad de conectarnos y comunicarnos desde el centro de nuestro corazón.
Cuando dudamos o estamos perdidos y volvemos a ese eje, el corazón sabrá hacernos sentir por dónde es el camino.
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Nivel 3: visión
Este tercer nivel es más místico y se relaciona con la visión espiritual expandida, los sueños lúcidos y otros tipos de comunicación que no todas las personas desarrollan. Tiene que ver con la posibilidad de sentir energéticamente los lugares, situaciones o personas, y poder actuar en un nivel mucho más sutil sobre esos campos de energía.
Nivel 4: conexión
Este último nivel se relaciona con el desarrollo de la conciencia y sabiduría universal. Es la que se activa durante la meditación u otras prácticas de expansión de conciencia, y que conlleva el entendimiento de que todos somos uno. Reconocemos nuestro poder interior para cambiar y sanar nuestras vidas.
Ahora que conoces estos cuatro niveles de la intuición, podrás estar más conectado.
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