7 cosas que tu gato odia aunque no lo sepas

No cabe duda de que los gatos son animales muy especiales. Hay quienes los aman y quienes les tienen respeto, pero la mayoría de las veces ni unos ni otros llegan a comprenderlos realmente.

Si quieres empezar a conocer mejor a tu minino, es muy importante que sepas algunas cosas sobre ellos. Por ejemplo, que hay siete cosas que todos los gatos odian. Si logras comprender mejor a tu mascota, y dejas de hacer tener estos comportamientos que ellos odian, seguramente tendrán una relación mucho más estrecha.

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1. Mojarse

Aunque hay honrosas excepciones, la verdad es que los gatos detestan mojarse. Es probable que ya lo hayas notado si tienes gatos, pero hay varias explicaciones para comprenderlo.

La primera cuestión es que el origen del gato está en zonas desérticas, donde no podían tener demasiado contacto con el agua.

Otra explicación tiene que ver con que el sistema respiratorio de los gatos es muy delicado. Por lo tanto, mojarse puede ser perjudicial para su salud, e instintivamente lo evitan (aunque un gato doméstico no va a verse afectado por esto).

2. Que no se le preste atención

Nada odia más un felino que ser ignorado. Puede que no siempre quieran tu atención. Pero cuando la quieren, la quieren ya.

Por eso, que no te sorprenda que si estás trabajando o estudiando muy concentrado en otra cosa, tu gato empiece a rondarte demandando atención. Alguno de sus trucos favoritos: sentarse justo encima del portátil o los apuntes, maullar a tu alrededor, y treparse a las cosas.

3. Los olores fuertes

Es cierto que el olfato de los gatos no es tan eficiente como el de los perros, pero eso no quiere decir que no sea sensible. Sobre todo, son muy susceptibles a aromas muy fuertes, que posiblemente harán que salgan corriendo si los haces olerlos.

Algunos son el del ajo, el humo del tabaco, el vinagre, la cebolla o los cítricos.

4. El humo

Esto no es exclusivo de los gatos, sino que casi todos los animales le temen al humo. En realidad, es porque el humo significa fuego, y para ellos el fuego es sinónimo de peligro. Por eso es natural que se alejen enseguida si hay demasiado humo por algún motivo.

5. El exceso de contacto físico

Esto no es así en todos los gatos, pero sí en la mayoría. Aunque cualquiera que tenga un felino sabe que son animales sumamente mimosos y compañeros, lo cierto es que eso no implica que les guste que se los esté tocando todo el tiempo.

A ellos les gusta recibir tu cariño cuando ellos quieren y durante el tiempo que quieran. Pero vamos, ¿es que a ti te gustaría tener a alguien encima acariciándote el pelo todo el día?

6. Que les cambien su rutina

Los gatos son muy distintos a los perros en esto. Si bien a los animales, como a los humanos, les sirve tener rutinas, el gato es mucho más apegado a ellas. Por eso, cualquier cambio puede afectarlos.

Es importante que pienses algunas cosas muy bien y trates de no estar modificándolas todo el tiempo. Por ejemplo, el lugar donde tienen cada cosa, el tipo de alimento que le compras, etc.

Las mudanzas, viajes y traslados en general son posiblemente lo que los gatos más odian en el mundo.

7. Los ruidos estridentes

Los sonidos estridentes no solo son odiados por los gatos. También puede afectarlos emocionalmente, generándoles estrés, nerviosismo y ansiedad.

Esto se debe a que los gatos tienen un sentido del oído muy poderoso y se mantienen pendientes de lo que ocurre en su entorno. Debido a que son tan territoriales, entenderán un sonido fuerte como una amenaza desconocida dentro de su terreno, en especial si aparece de manera repentina.

Entonces, estar en un entorno muy ruidoso puede ser un verdadero problema para ellos.

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