La vida humana a lo largo de la historia se ha desarrollado en oleadas de migración y asentamiento alterna. El movimiento de personas a través de la tierra llevó al descubrimiento de nuevos territorios, así como la creación de nuevas comunidades entre diversas personas que formaron pueblos, ciudades y naciones. Navegando por esta dualidad entre la exploración y el asentamiento, el movimiento y la quietud son la esencia fundamental del ser humano.
Las consecuencias de las guerras mundiales y los desastres naturales han hecho que en el mundo se desplacen millones de personas en todos los continentes. Los refugiados que buscan amparo de estos desastres, llevan de sus casas lo que pueden e intentan reasentarse en tierras desconocidas. A menudo tratan de darle un nuevo comienzo a sus vidas, con nada más que una tienda o carpa para llamar su casa.Tejiendo un hogar" reexamina el concepto arquitectónico tradicional de tiendas de refugiados, mediante la creación de un tejido técnico y estructural que se expande para crear resguardo y que se contrae para movilidad. Todo esto, sin perder las comodidades de una vida contemporánea: calefacción, agua corriente, electricidad, almacenamiento, etc.Cada tienda tiene su propio sistema de recolección de agua, mediante la utilización de los canales naturales formados por la tela para dirigir el agua a la cúpula, en donde se encuentra el punto de almacenamiento. Mediante el uso de un tejido con propiedades térmicas, las tiendas también pueden convertir la radiación solar en electricidad y en agua caliente, que puede ser usada para ducharse.