Durante 20 años, Erwin Macua fue el guardia de seguridad del St. Theresa's College, una escuela superior de la ciudad de Cebú, Filipinas. A los 18 años, Erwin había dejado de estudiar y consiguió ese empleo, en el que se desempeñó durante las décadas siguientes. Sin embargo, algo sentía Erwin cuando veía a los estudiantes cada día. Por eso, decidió comenzar a estudiar.
A los 38 años, y con tres hijos, Erwin se graduó como un alumno más de la escuela en la que tantos años trabajó como guardia de seguridad. Conmovió al mundo con su historia luego de perseguir y lograr su sueño.
Luego de la graduación, en la que participó con emoción, acompañado por su mujer y sus hijos, Macua dijo que continuar con sus estudios siempre había sido su sueño.
También expresó que le gustaría seguir estudiando hasta graduarse como profesor, porque siente un afecto especial por los niños.
"La educación es una buena carrera y un desafío porque uno puede realmente cambiar la vida de los estudiantes", explicó. Su vida cambió por completo, y ahora le gustaría ayudar a los demás a hacerlo.
Erwin usó sus ahorros para pagar el primer año de sus estudios, y estudiaba durante sus tiempos libres en las horas que pasaba como guardia. Alguien se enteró de su esfuerzo, y donó anónimamente el dinero para que completara sus estudios.
Ahora, Macua continuará trabajando como guardia y estudiando, hasta graduarse como profesor. Tal vez su vida cambie una vez más y se dedique finalmente a enseñar, como siempre soñó.