Seguro ya te han dicho lo importante que es descansar lo suficiente. Pero si estás leyendo esto, es posible que a pesar de saberlo no estés durmiendo bien. En la actualidad cometemos el error de creer que las horas de sueño son tiempo perdido, pero no hay nada más alejado de la realidad.

El descanso es absolutamente necesario para que el cuerpo y el cerebro puedan funcionar con normalidad durante la vigilia. Por eso cuando dormimos lo suficiente nos sentimos más enérgicos, más lúcidos y mucho más animados.

Pero si todavía sigues creyendo que dormir es para los débiles, estos nuevos descubrimientos te sorprenderán.

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El sueño te hace lucir menos atractiva

Una investigación publicada en 2013 en la revista Sleep ha demostrado que las personas que duermen poco se ven menos atractivas. Para demostrarlo, el estudio reunió a un grupo de voluntarios, a los que se les mostraron dos fotos de distintas personas.

De cada persona, había dos fotos para evaluar: una tomada luego de que hubieran dormido ocho horas, y otra tomada luego de haber pasado un día entero sin dormir.

El resultado fue prácticamente unánime: todos los voluntarios aseguraron que la gente se veía más atractiva cuando estaba descansada que cuando estaba sin dormir.

De acuerdo a la encuesta que se le hizo a los voluntarios, estos notaron que en las fotografías sin dormir las personas lucían párpados caídos, ojos rojos e hinchados, ojeras, la piel más pálida y más arrugas que en las imágenes tomadas tras un sueño reparador.

También señalaron que se formaba una expresión de cansancio y tristeza en el rostro.

El atractivo social

Lo llamativo e inesperado es que diversas investigaciones de la Universidad de California han descubierto que esto tiene también un impacto social: dormir mal nos convierte en personas más solitarias y menos inclinadas a las interacciones sociales.

Pues además de lucir menos atractivos, cuando dormimos poco también tenemos menos ganas de relacionarnos socialmente. Eso de seguro lo habrás notado alguna vez. El cansancio y la irritación que suele generar la falta de sueño nos aleja de las relaciones sociales saludables.

De acuerdo con los investigadores, la falta de sueño puede ser la verdadera causa que está detrás de la “epidemia de soledad” que se vive en la actualidad.

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Ahora que sabes que dormir poco también afecta tu vida social, ¿no tienes ganas de descansar un poco mejor?

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