Una iniciativa llamada “Aire Limpio” se esta llevando a cabo en la playa de los Nietos en Murcia, España. De esta manera los niños pueden tomar clases presenciales a la vez que obtienen una mejor calidad del aire durante la pandemia. Si alguna vez se soñó con tener clases en la playa, ahora una escuela lo ha hecho realidad.
En lugar de lamentarse por las restricciones de Covid-19 y después de pasar un año impartiendo lecciones online, planearon una solución creativa. Pizarras y pupitres se instalaron la orilla del mar para dar clases a los alumnos refrescándose con la brisa marina.
La arena de la playa de los Nietos en Murcia no recibe por estos días personas en traje de baños ni la cubren toallas. Esta vez son pupitres, alumnos y profesores con mascarillas pertenecientes a la escuela Félix Rodríguez de la Fuente.
Experiencias de alumnos y profesores
Juan Francisco Martínez, profesor de inglés dijo a Reuters:
“Es seguro, los niños se divierten mucho. Lo que aprenden aquí no lo olvidan”
Palabras que son confirmadas, ya que no todos los días se tiene el privilegio de aprender en el mar. Lo único que se debe cuidar es que las hojas de los cuadernos no se vuelen por el viento.
La rutina inicia a las 8 de la mañana con los profesores preparando el lugar y dejando su pizarra portátil lista para trasmitir nuevos conocimientos a los niños. Son un total de 8 materias las que se imparten en la Playa de los Nietos y las clases duran 20 minutos. Cada grupo guarda el respectivo distanciamiento social y van rotando por las distintas zonas que se han implementado.
¡Me encanta ir a la playa! Prefiero estar en la playa porque aquí me siento más relajado y me siento más a gusto”, dijo Antonio Fernández (9) a Reuters.
El movilizarse a la playa también les ha permitido a los alumnos que conozcan el trabajo de los pescadores. Quienes enseñaron a los estudiantes como se pesca y de como ellos han sido capaces de mantener el oficio en tiempos de pandemia. Así lo informó Alfonso Vera, director de la escuela.
Esto es muy bueno porque estoy con mis amigos, estoy en la playa, a mí me encanta la playa, siempre en verano… siempre vengo aquí a bañarme todos los días y me encanta la arena”, manifestó Luz (10), otra de las alumnas.
Todos los niños que asisten a estas clases están felices. Aprenden que la playa es un buen lugar hasta para impartir clases y el resultado en los estudiantes es satisfactorio. El objetivo de esta iniciativa es mejorar el aire que pueden respirar los alumnos mientras ven sus clases presenciales y evitar los contagios. Y hasta los momentos, todo ha salido bien, no se han registrado casos de transmisión del virus.
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