¿Sabías que mantenernos delgados es bueno para el planeta? Así, según un estudio de la London School of Hygiene and Tropical Medicine, una sociedad delgada, como la vietnamita, consume un 20 % menos de alimentos y contamina menos que otra en la que casi el 40 % de su población sufre obesidad. En este último caso encontraríamos a EE.UU.
Una posible explicación que nos lanzan los autores de este informe se debe a que quienes tienen sobrepeso suelen caminar menos y son asiduos al automóvil, entre otras causas.
Sin duda, el verano es el momento del año en el que de manera casi irremediable somos más conscientes de los michelines y kilos de más, sobre todo cuando acudimos a la piscina o a la playa, y el bañador muestra sin paliativos nuestra grasa abdominal. Pero no hay que tachar esta cuestión de mero problema estético, pues también puede implicar infinidad de patologías como colesterol alto, diabetes o aumentar el riesgo de sufrir incluso diversos tipos de cáncer.
Por lo tanto, parece que nos sobran razones para ponernos en serio con la tarea de adelgazar. Lo más habitual es que este sobrepeso se deba a una alimentación inadecuada y al sedentarismo. Te contamos qué puedes hacer para meter en cintura –nunca mejor dicho– este problema.
Una España con sobrepeso
No podemos olvidar que en España el 37,65 % de la población sufre de sobrepeso y un 16 %, obesidad. No obstante, a la hora de perder peso no todo vale y no podemos lanzarnos a esta tarea a lo loco. En este sentido, según la Fundación Española del Corazón (FEC) algunas dietas pueden suponer un riesgo para nuestro corazón y nos recomienda que huyamos de aquellas que prometan perder un kilo a la semana
Dicho organismo explica que la mayoría de estos regímenes acelerados resultan pobres en proteínas y reducen nuestro peso “a expensas de la masa muscular y de las proteínas pudiendo tener consecuencias negativas sobre el corazón”.
Pero también encontramos el lado contrario: “Dietas ricas en proteínas y pobres en hidratos de carbono que ofrecen resultados rápidos basados en carne, huevos y otros alimentos hiperproteicos dejando fuera los alimentos ricos en hidratos de carbono, como las patatas, las verduras, las frutas, las hortalizas y los cereales”, destacan en la FEC.
¿Cómo saber si padecemos sobrepeso?
Aunque suele ser algo que salta a la vista, conviene averiguarlo correctamente empleando el Índice de Masa Corporal (IMC) que nos permite calcular el peso ideal. Este es el resultado de dividir tu peso entre tu estatura al cuadrado, es decir que el cálculo sería IMC = KG/M2.
Gracias a su cálculo podemos saber en qué situación nos encontramos. En concreto, podemos hablar de las siguientes situaciones:
- Obesidad grado 1 de bajo riesgo cuya puntuación del IMC fluctúa entre 24 y 30 en mujeres, mientras que para los varones se sitúa entre 25 y 30.
- Obesidad grado 2 de riesgo moderado. Tanto hombres como mujeres presentan u n IMC entre 30 y 40.
- Obesidad grado 3 severa. En ambos sexos es superior a 40.
Por supuesto, a las personas musculadas es posible que les salten todas las alarmas al efectuar esta operación y obtener un IMC en la categoría de sobrepeso. No es motivo de preocupación.