Hoy en día, el veganismo se ha expandido a diferentes regiones del mundo y muchas organizaciones se dedican a fomentarlo e informar sobre él.

Un ejemplo de ello en Latinoamérica es la Fundación Vegetarianos Hoy, cuya misión se basa en guiar a las personas hacia una alimentación basada en vegetales, facilitándoles el camino a través de sus certificaciones y diferentes campañas educativas y legales.

El origen del concepto

El 1 de noviembre de 1944, los activistas británicos Donald Watson y Elsie Shrigley decidieron crear la Vegan Society, tras ser partícipe de la Sociedad Vegetariana de ese país, donde sentían que no se estaba observando el problema de la explotación animal en su totalidad.

Esta inquietud fue compartida con otros 23 miembros de la agrupación, que buscaban fomentar una ética de respeto hacia todos los animales, evitando el consumo y uso de cualquier producto de origen animal.

Se hacían llamar los “No-lácteos”, sin embargo, el nombre no parecía convencer y Watson buscó una nueva palabra que los identificara.

De esta forma, acuñó el término “vegano” a quien no solo consumía carne sino todo derivado animal, es decir, leche, mantequilla, queso y huevos.

Este concepto tiene una razón de ser, pues la palabra “vegano” está hecha con las letras del inicio y del final de la palabra “vegetariano”, simbolizando que el veganismo inicia desde el vegetarianismo pero a la vez es el destino final de este (“vegetariano” → vegano; en inglés: “vegetarian” “vegan”).

La creación de este concepto dio paso a la Vegan Society y al movimiento mundial que es conocido hasta el día de hoy como veganismo.

Debido a esto, en 1994, Louise Wallis, entonces presidente de la Sociedad Vegana del Reino Unido, instauró la conmemoración del Día del Veganismo, tras cumplirse 50 años de la fundación de esta organización.

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Y ¿qué significa el veganismo?

En la actualidad, de acuerdo a The Vegan Society, el veganismo es:

“El veganismo es una filosofía y una forma de vida que busca excluir, en la medida de lo posible y practicable, todas las formas de explotación y crueldad hacia los animales para alimento, vestimenta o cualquier otro propósito; y por extensión, promueve el desarrollo y uso de alternativas libres de animales en beneficio de los animales, los seres humanos y el medio ambiente. En términos dietéticos, denota la práctica de prescindir de todos los productos derivados total o parcialmente de animales".

Es decir, en términos generales se trata de decidir no consumir carne y derivados de ningún animal, así como tampoco vestir con cuero o lana, ni fomentar y/o asistir a lugares donde se usen animales, como zoológicos, circos, rodeos, peleas, carreras y actividades que involucren comprar, exhibir o lucrar con animales.

¿Qué resulta más complicado de ser vegano?

En una entrevista a Donald Watson, que grabó el autor de The Vegan Passport, George D. Rodger, el 15 de diciembre de 2002, la cual fue publicada en The Vegan Summer en el año 2003 -dos años antes de la muerte del activista a sus 95 años-, este le preguntó:

  • - ¿Qué te resulta más difícil de ser vegano?

Y Watson respondió: “Bueno, supongo que es el aspecto social: excomulgarme de esa parte de la vida donde la gente se reúne para comer. La única forma de aliviar este problema es que el veganismo sea cada vez más aceptable en las casas de huéspedes, los hoteles, donde quiera que uno vaya, hasta que uno espera que algún día se convierta en la norma”.

La problemática que presenta Watson seguramente es de las más comunes cuando las personas han transitado hacia ese estilo de vida, sin embargo, en la actualidad y desde hace algunos años, existen organizaciones que buscan simplificar la vida de quienes deciden tomar esa decisión.

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Un ejemplo de lo anterior es la Fundación Vegetarianos Hoy -ONG internacional que trabaja en Latinoamérica para promover una alimentación basada en vegetales y reducir el sufrimiento de los animales de producción- que se dedica a certificar productos veganos, entregándoles seguridad de que se trata de un producto 100% plant-based a las personas de que lo que están consumiendo.

Al mismo tiempo, brindan diferentes programas para que la población pueda adentrarse en este estilo de vida de forma responsable, fácil y consciente.

Por un lado está el Veggie Challenge, una asesoría nutricional gratuita de 30 días para probar una dieta plant-based, y por otro, la campaña #SinLácteos que busca informar sobre los beneficios de dejar los productos lácteos fuera de la alimentación diaria.

A propósito de ello, la nutricionista y coordinadora de Cambio de Alimentación de la ONG, Soledad Rapimán, explica:

"Llevar una alimentación 100% plant-based es más fácil de lo que se cree, es importante buscar información y asesorarse con un profesional de la nutrición especialista en el tema, hacerse exámenes de sangre para consumir las dosis adecuadas de suplementación, llevar una alimentación lo más natural y variada posible, consumir a diario proteínas vegetales y fuentes alimentarias vegetales que aportan calcio, hierro, zinc, omega 3, usar sal yodada, entre otros consejos e indicaciones que te puede dar un nutricionista”.

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