Al llegar la noche, nuestro cuerpo se prepara para el descanso y, como no gastamos mucha energía, las calorías que se ingieren tardan más tiempo en quemarse. De todas formas, si aprendes cómo cenar de la manera más saludable puedes incluso bajar de peso mientras duermes aunque creas que es imposible.

Aunque la mayoría de los nutricionistas recomiendan hacer una cena ligera, nos hemos acostumbrado a desayunar y almorzar deprisa por el ritmo de trabajo, y llegar hambrientos a casa al finalizar el día. Además, para que el cuerpo funcione por la noche de forma correcta, lo ideal es cenar, por lo menos, dos horas antes de acostarnos; algo que, por lo general, no solemos hacer. 

En esta nota podrás conocer cuáles son 5 alimentos que es mejor que evites antes de acostarte para ayudar a tu cuerpo a trabajar mejor y que, al despertar, no te sientas pesado o hinchado como antes de descansar. 

cenar

1. Alimentos con grasa

Evita los helados, la comida rápida, los alimentos con mucho queso, mantequilla, o cocidos en aceite; ya que dificultarán el proceso de digestión durante la noche. 

2. Alimentos azucarados

Evita los chocolates, galletas, pasteles o snacks muy azucarados; ya que te darán más hambre al despertar. 

3. Carnes o proteínas pesadas

Si tu cuerpo por la noche recibe una gran cantidad de alimentos, la quema de energía se mantendrá constante y probablemente te cueste más conciliar el sueño. 

cena ligera

4. Picantes

Evita los alimentos o especias picantes antes de dormir porque podrían producirte dolor o acidez, e interrumpir tu sueño. El ajo y la cebolla también pueden provocar acidez y resultar indigestos en la cena, especialmente si se consumen crudos.

5. Lechuga

Es un alimento con alto contenido de fibra insoluble y puede generar gases e hinchazón. Otros vegetales ricos en fibra, como el apio, también pueden volver más lenta la digestión.

En todos los casos, además, debes evitar las porciones grandes. Tu cena debe estar compuesta de porciones pequeñas que tu cuerpo pueda digerir con facilidad durante la noche. Pero, no tiene que ser una cena escasa porque podemos despertarnos a medianoche hambrientos de nuevo.