Polémica: Argentina levanta prohibición de exportación de ganado vivo. Recientemente, el país derogó una prohibición que estuvo vigente durante más de 50 años, permitiendo nuevamente la comercialización de rebaños vacunos en pie destinado a faena en el extranjero. Esta medida busca ampliar los mercados para el sector ganadero y se enmarca en un proceso de desregulación económica impulsado por el gobierno actual. ​

La prohibición original, establecida en 1973, tenía como objetivo asegurar el abastecimiento interno de carne. Sin embargo, las autoridades actuales consideran que, en el contexto actual, esta restricción ya no es necesaria y que su eliminación permitirá a Argentina integrarse más plenamente en el comercio mundial de ganado. ​

Es importante destacar que, aunque la exportación de animales vivos puede abrir nuevas oportunidades comerciales, también plantea desafíos logísticos y sanitarios que deberán ser gestionados para garantizar el bienestar animal y la calidad del producto exportado. ​

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Vacas

abordaje del gobierno actual

​El 26 de febrero de 2025, el Gobierno de Argentina, encabezado por el presidente Javier Milei, derogó el Decreto N° 322/1973, que prohibía la exportación de ganado vacuno en pie con destino a faena para consumo. Esta derogación se formalizó mediante el Decreto N° 133/2025, publicado en el Boletín Oficial. ​

La medida busca generar nuevas oportunidades en el mercado vacuno exportador y se fundamenta en el libre comercio y las decisiones libres del sector ganadero, considerando que no existen motivos para mantener esta restricción. ​
Argentina.gob.ar

Esta decisión forma parte de una política más amplia de desregulación económica impulsada por el gobierno actual, que incluye la eliminación de restricciones a la importación y exportación por motivos económicos. ​

el bienestar animal bajo la lupa


El tratamieto de la exportación de ganado vivo en Argentina fue objeto de debate en cuanto al bienestar animal. Aunque la medida tiene el potencial de abrir nuevos mercados, algunos críticos señalan que podría poner en riesgo el bienestar de los animales durante el transporte y la adaptación a nuevas condiciones.

Las preocupaciones incluyen el estrés que los animales podrían sufrir durante largos viajes en barco, así como las condiciones de salud y cuidado que se les proporcionen en el destino.

El gobierno y las autoridades del sector ganadero afirmaron que se implementarán regulaciones y controles sanitarios para garantizar que el transporte y la exportación de ganado se realicen de manera ética y conforme a los estándares internacionales de bienestar animal. Sin embargo, la efectividad de estas medidas sigue siendo un tema de discusión, ya que no todos los actores del sector están convencidos de que las garantías sean suficientes.