Apasionada por la literatura, escritora, cantante, actriz, poetisa, guionista y bailarina, su legado de vida se traduce en ser una activista por los derechos civiles. Es así que la historia de vida de Maya ha servido de inspiración para todo tipo de comunidades, principalmente la afroamericana.
Reconocida como una gran poeta estadounidense, sufrió injusticias desde muy pequeña debido a que a los siete años de edad fue víctima de abusos sexuales cometidos por una persona muy cercana a su familia. Durante años calló su voz por miedo y se dedicó a leer autores prestigiosos como Shakespeare, James Weldon Johnson, Paul Larnstom, Countee Cullen , Langston Hughes y Edgar Allan Poe, entre otros. También, artistas feministas de raza negra como Frances Harper, Anne Spencer y Jessie Fauset despertaron su amor y pasión por la vida a pesar de las adversidades.
A raíz del traumático episodio, al transcurrir los años, logró poner en palabras su dolor y comprendió que tenía mucho para decir. La violación fue una herida inmensa, con la cual cargó un largo período de su vida.
Sin embargo el arte, en todas sus expresiones le permitió canalizar las penas y tristezas. Tal es así que sus primeros pasos en la danza y actuación se dieron cuando asistió a la Escuela de Labor Social de California durante la Segunda Guerra Mundial, acompañada por su madre, lo que posibilitó destacarse y encontrar un nuevo sentido.
Antes de culminar sus estudios, trabajó como conductora de tranvías y fue la primera mujer de raza negra en ocupar este puesto en San Francisco.
No obstante, a los 17 años de edad, tuvo su primer hijo. Esta responsabilidad la llevó a luchar incansablemente por su niño, de ahí que se esforzó sin cesar y hasta se vio obligada a aceptar trabajar de prostituta o regentar un burdel para poder atenderlo económicamente.
Ciertamente, sus colecciones de poesía y ensayos se han convertido en un éxito literario a nivel internacional, en especial sus siete autobiografías. Además, obtuvo una nominación al premio Pulitzer y tres a los Grammy. Y como si esto fuera poco, en sus viajes por Europa aprendió seis idiomas.
Es propicio mencionar que Maya trabajó con Martin Luther King Jr. y Malcolm convirtiéndose en una voz referente para las mujeres y la raza negra, llevando como bandera la lucha y equidad mediante una visión abierta de la humanidad en la cual todos puedan ser respetados y honrados.
SIETE FRASES INSPIRADORAS DE MAYA ANGELOU
- “Si no te gusta algo, cámbialo. Si no puedes cambiarlo, cambia de actitud.”
- “Un pájaro no canta porque tiene una respuesta, canta porque tiene una canción.”
- “Como las esperanzas brincando alto, aún así… yo me levantaré.”
- “Necesitamos alegría como necesitamos el aire. Necesitamos amor como necesitamos el agua. Y nos necesitamos los unos a los otros como necesitamos la tierra que compartimos.”
- “El amor no reconoce barreras. Salta obstáculos, brinca vallas, penetra paredes para llegar a su destino lleno de esperanza.”
- “Sobrevivir es importante. Luchar es elegante.”
- “Deja que la esperanza sea el puente que construyas para superar lo malvado y dar la bienvenida a la bondad.”
Con docenas de premios y más de 50 títulos honoríficos que acreditan su papel inspirador, a los 86 años Maya Angelou falleció el 28 de mayo de 2014. A los pocos días, su primera autobiografía: “Sé por qué vuela el pájaro enjaulado” ocupó el primer puesto en lista de superventas.
Indiscutiblemente la soledad, angustias y decepciones la convirtieron en una mujer valiente y trabajadora.
A pesar de haber transitado momentos de oscuridad, Maya escribió su propia historia y se levantó iluminando su camino. De un pasado arraigado en el dolor llegó a inspirar sueños y esperanza. Su compromiso con el activismo social y la promoción de los derechos civiles estuvo presente a lo largo de su ardua vida.