Los periodistas de España lo han bautizado como “El Messi del ajedrez”. Vamos a repasar la maravillosa historia de un chico de 10 años, quien a tan breve edad le ganó al mejor ajedrecista del planeta y ya suma varios récords.
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Se llama Faustino Oro y es un niño argentino
Ya había ganado Bastante fama por su habilidad como ajedrecista precoz. Empero, todos se enteraron de su más reciente victoria: nada más, y nada menos, que ante el flamante campeón noruego Magnus Carlsen.
Este juego se llevó a cabo durante una partida “bullet”, donde cada jugador tiene un minuto para mover su pieza. El niño y Magnus Carlsen coincidieron en el circuito de torneos que se llevan a cabo en el sitio Chess.com. ¡Con victoria para el pequeño de 10 años!
“Estoy muy contento; una gran alegría para mí porque nunca había jugado contra él”, dijo Faustino celebrando la partida luego ganar. Es así como se perfila como una de las promesas del ajedrez internacional.
Vivía en Buenos Aires antes de mudarse a España
El pequeño Faustino Oro es hijo de un matrimonio de contadores públicos. Como buen argentino, es fanático del fútbol e hincha de Vélez Sarsfield. Estudió hasta cuarto grado en la capital Argentina, antes de mudarse a España.
Durante el año 2020, le tocó permanecer en el confinamiento del COVID. Su papá, Alejandro Oro, extrajo de un armario un viejo tablero de ajedrez. Lo colocó en la mesa del living y quiso darle algunas lecciones a su hijo.
Alejandro Oro, en su juventud, había participado en varios clubes de ajedrecistas. Una herencia familiar, ya que el abuelo del pequeño Faustino también fue un avezado jugador. De ese modo, el juego de los alfiles y peones estaba presente en el ADN familiar.
Faustino se interesó en el ajedrez. Se inscribió en un portal de web donde había jugadores online. Al principio, el niño perdió muchas partidas. Pero, al cabo de un mes, se volvió invencible en esa comunidad virtual.
En los meses siguientes, sus padres vieron que el niño dedicaba horas enteras a ver videos de YouTube donde enseñaban jugadas sobre tableros de ajedrez. En poco tiempo, Faustino dominaba movimientos casi imposibles y movía con astucia todas las piezas.
La fama le llegó después de levantado el confinamiento
Su padre lo llevó a los clubes de ajedrecistas que conocía. En apenas tres años, el niño disputó un poco más de 46 mil partidas, tanto en Internet como con jugadores presenciales. Acumuló 2900 puntos en su rating y sus padres estaban sorprendidos.
Con ayuda de la Federación Argentina de Ajedrez (FADA), sus progenitores decidieron ir a vivir a España. El niño tenía una facultad demasiado evidente. Lo mejor era llevarlo a Europa, para que aprendiese en las mejores academias y con la élite del ajedrez mundial.
Una prometedora carrera como ajedrecista
Ya en suelo español, Faustino se enroló en varios campeonatos internacionales. Hay fotos suyas en el Centro de Congresos en la ciudad de Samarcanda, en Uzbekistán. Ahí, logró un excelente desempeño: enfrentó a casi 200 ajedrecistas e hizo jugadas muy interesantes.
La prensa española lo ha bautizado como el “Messi del ajedrez”. Así como el conocido futbolista (campeón del mundo) fue a España para formarse; el niño Faustino también ha aterrizado en las comarcas españolas, para adiestrarse en el ajedrez.
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¿Cuántos niños prodigios del ajedrez se han conocido? Hay varios, pero el pequeño Faustino parece tener la impronta de los ganadores. Haber vencido al campeón, Magnus Carlsen, deja ver que su talento es excepcional.
Fuente: INFOBAE.