Que hay personas homofóbicas y en general intolerantes, no es de sorprender incluso en el 2017. Pero es que parece que cada vez se vuelven más osados en sus intentos por hacerle daño a una comunidad que ha sido históricamente castigada.
La cultura LGBT+ brasileña lo sabe muy bien, pues ha recibido varios reveces en las últimas semanas. Los últimos vinieron de los miembros Movimiento Brasil Livre, un grupo homofóbico de presión en línea que ha hecho hasta lo imposible para evitar que esta comunidad pueda transmitir sus ideas pacíficamente.
Primero, lograron cerrar antes de tiempo una exposición de Cultura Queer y luego un juez de Sao Paulo prohibió la presentación de una obra de teatro que ya se había presentado en otras ciudades del país.
Pero la gota que colmó el vaso fue que un juez determinó que las terapias psicológicas de reversión sexual eran legales. Es decir, la “cura” para la homosexualidad.
Las redes explotaron y el hashtag #TrateSeuPreconceito (“trate su prejuicio”) se hizo trending topic a nivel mundial.
Artistas, cantantes y actores tuitearon y publicaron videos en protesta contra esta medida.
Además, muchos usuarios aprovecharon para contar experiencias personales que demuestran que el amor nunca será una enfermedad, sin importar la forma que tome. “Hoy tengo fuerzas para escribir que ser LGBT no es una enfermedad”, publicó un usuario en Facebook.
También hay quienes manifiestan que no son ellos los que deben cambiar su orientación sexual, sino “es la sociedad la que precisa aprender a tratarnos de forma diferente”. Otra persona simplemente declaró: “si hay algo de lo que me siento orgullosa es de ser LGBT”.
Esperamos que reacciones como estas hagan despertar a más de uno la próxima vez que juzguen a alguien por ser fiel a su forma de ser.