Idit Harel Segal es una mujer de Israel, quien tomó lugar en las noticias desde el momento en que dona un riñón a un niño de 3 años y le salva la vida. Sin embargo, esto no fue lo único relevante, pues el infante es de la Franja de Gaza. Como se sabe, estos son países que están en enfrentamiento bélico.

Esto pasó, debido que la mujer quiso que su existencia ayudara a dar vida. De este modo, decidió donar un riñón. Aunque al principio no sabía quién recibiría su órgano, al recibir la información de que sería un niño se sintió realmente feliz, pues ella es educadora infantil.

Más allá de las diferencias que existen entre sus naciones, Idit solo vio el lado positivo. Estaría ayudando a un pequeño niño a tener una mejor vida.

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¿Qué la motivó a hacer la donación?

Esta maestra de educación infantil empezó un proceso de poco más de 9 meses, en un grupo que vinculaba a donantes y receptores. Lo que la llevó a donar uno de sus riñones fue el recuerdo de su difunto abuelo, quien en vida le transmitió un muy importante mensaje.

Su abuelo, quien sobrevivió al Holocausto, un día le dijo “vive una vida con sentido y que se apegue a las tradiciones judías. No hay algo más importante que salvar una vida”. Teniendo estas palabras presentes, Segal decidió hacer la donación.

Sin embargo, la familia de la educadora no estaba de acuerdo, decían que ella estaba arriesgando su vida de manera innecesaria. Aún así, eso no la detuvo, al final sus parientes tuvieron que acceder, apoyarla y desearle lo mejor en la cirugía.

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El receptor sería un niño palestino

Por otro lado, el receptor del órgano resultó ser un niño de 3 años de edad, de la Franja de Gaza. El pequeño tenía una enfermedad renal congénita y habían tenido que practicarle diálisis permanentemente desde que nació.

Cuando Segal supo que su riñón lo recibiría un niño palestino, prefirió ocultárselo a su familia. Si la respuesta por la decisión de donar había sido mala, no quería imaginar cómo sería si supieran que el receptor era palestino. Eligió que se enteraran después de haber hecho la cirugía.

En este sentido, la israelí le escribió una carta. Esta nota, entre otras cosas, decía “Espero que la cirugía sea exitosa y que tengas una vida larga, sana y significativa”.

Una persona escribe en un cuaderno en un parque

Una mujer israelí también fue salvada

La emotiva acción de Idit Harel Segal no solo benefició al niño palestino. Ya que para poder acelerar el proceso de donación, el hospital le sugirió al padre del menor que donara un riñón a un receptor israelí, y así fue.

De esta forma, una joven mujer de 25 años, madre de dos hijos, se sometió a un trasplante que le salvó la vida.

En junio del 2021 se realizó la cirugía de Segal y el trasplante del pequeño niño de tres años. Todo salió perfectamente e incluso la familia de Idit le deseó buena suerte en el proceso.

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Aún existen muchas personas que desean hacer el bien, sin mirar a quien ¿Tú qué opinas? Leemos tus comentarios.