Un momento memorable de la ceremonia de los Premios Oscar 2020 fue el discurso de Joaquin Phoenix, ganador del Premio a mejor actuación masculina por su rol protagónico en Joker. Sus palabras fueron un alegato a favor de la justicia, la igualdad y de dar voz a quienes no son escuchados o no la tienen, como las demás especies. El discurso se volvió viral y la industria láctea salió a contestarle.
“Hablemos de desigualdad de género, de racismo, de los derechos LGTB, de los animales; la lucha contra las injusticias. Nos hemos desconectado mucho del mundo natural, y estamos en un mundo egocéntrico y explotamos nuestro entorno para nuestro bien", sentenció.
En su discurso, también criticó la explotación que sufren los animales, y las vacas en particular, en las industrias ganadera y láctea. “Pensamos que tenemos derecho a inseminar artificialmente a una vaca, y cuando pare, le arrebatamos a su cría, aunque sus gritos de angustia sean inconfundibles. Y entonces le robamos la leche debía ser para su ternero y la ponemos en café o cereales", sentenció el actor.
Qué dice la industria
Sus palabras no pasaron desapercibidas, y las mismas industrias decidieron salir a responderle. El portavoz de la Federación Nacional de Productores de Leche de Estados Unidos, Alan Bjerga, alegó que “si Phoenix estudiase el compromiso de los granjeros de la industria láctea con el bienestar de los animales” podría tener una “percepción distinta del valor de las lecherías”.
Sin embargo, son muchas las investigaciones conducidas por organizaciones sin fines de lucro que aseguran que estas industrias son crueles con los animales. Desde Igualdad Animal señalan que es responsable de uno de los ciclos productivos más crueles que existen.
“Se insemina a las vacas artificialmente, se les separa de sus hijos nada más nacer y se les sustrae la leche que estaba destinada a sus pequeños. Cuando dejan de dar leche vuelven a ser inseminadas. Y así, una vez tras otra”, aseguran.
Además, agregan que los terneros machos son asesinados al poco tiempo para brindar a los humanos su carne. Las hembras, por su parte, se convierten en la siguiente generación de vacas productoras de leche inseminadas artificialmente.
En su respuessta al discurso de Phoenix, Bjerga también agregó que si el actor “tuviera una comprensión plena de la contribución que hacen los productos lácteos a un dieta nutritiva, especialmente para los niños, cambiaría su visión sobre cómo “las lecherías aportan a la salud mundial y de la importancia del sector para el sustento global".
A pesar de la postura de esta institución -que representa la de la industria en general-, ya son bastantes los estudios e instituciones que aseguran que los lácteos pueden ser fácilmente reemplazados por otros alimentos de origen vegetal ya que no son fundamentales para el crecimiento y desarrollo. Un ejemplo es el de la Universidad de Harvard, que incluso ha quitado estos alimentos de su pirámide alimenticia.
¿Por qué? En primer lugar, alegan que los lácteos contienen grasas saturadas que se asocian con altos niveles de colesterol. Además, con el tiempo, la enzima que metaboliza la lactosa disminuye y, con eso, también lo hace la capacidad de digerirla. Por eso, termina quedando en el intestino y provocando gases, dolor y diarrea.
Otro dato que refuta la postura de la industria es que no todos afirman que fortalezcan los huesos. Al contrario, los expertos señalan que “el calcio es importante. Pero la leche no es la única, ni siquiera la mejor fuente", y que es posible obtener el calcio de otros alimentos como vegetales de hoja verde, brócoli, frijoles y tofu. Además, sostienen que el retinol (vitamina A) en niveles altos puede debilitar los huesos, en lugar de fortalecerlos.