Desde Suecia hasta Vietnam, este año se organizaron protestas mundiales exigiendo soluciones reales para la crisis climática. Organizaciones como Extinction Rebellion y Fridays fo Future lideraron las manifestaciones masivas. Jóvenes de distintos puntos del planeta faltaron a clase para luchar contra la inacción política de sus líderes, siguiendo el ejemplo de Greta Thunberg.
Como resultado de estas protestas, el término “huelga climática” (climate strike, en inglés) se ha vuelto cada vez más popular entre los grupos preocupados por el ambiente, y los expertos del diccionario Collins de inglés han decidido convertir este término en la palabra más relevante de 2019.
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Cada año, los lexicógrafos del diccionario Collins, que existe desde 1819, monitorean aproximadamente 9.500 millones de palabras para hacer una lista de 10 términos nuevos y notables. Uno de ellos se corona como la palabra del año.
El diccionario Collins define la huelga climática como "una forma de protesta en la que las personas se ausentan de la educación o del trabajo para unirse a las manifestaciones que demandan medidas para contrarrestar el cambio climático".
El primer uso de la expresión se registró en 2015, cuando tuvo lugar una manifestación masiva durante la conferencia sobre cambio climático de la ONU en París. Sin embargo, la frase solo ganó fuerza a partir de fines de 2018, cuando la decisión de la joven activista sueca Greta Thunberg de faltar a la escuela los viernes para protestar frente al parlamento nacional fue noticia en todo el mundo.
Se estima que en septiembre de 2019 seis millones de personas se unieron a la huelga climática mundial, también conocida como la semana global por el futuro.
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Los lexicógrafos de Collins notaron que el uso de “huelga climática” incrementó cien veces en 2019, más que cualquier otra palabra en su lista.
En 2018, la palabra ganadora fue "uso único" o “de un solo uso” (single-use), que se refiere a los productos de plástico hechos para usarse una sola vez y desecharse inmediatamente, con toda la contaminación que eso implica.
Entre los demás contendientes a la palabra del año, hubo otros términos relacionados con el clima, incluyendo "reconstrucción" (rewilding), que significa "la práctica de devolver áreas de tierra a un estado salvaje", y "hopepunk", un movimiento literario y artístico que celebra la búsqueda de objetivos positivos frente a la adversidad.
El término “huelga climática” ha contribuido a difundir una nueva forma de exigir reformas por el bien del planeta, y está muy relacionado con el movimiento juvenil que ha abarcado ya más de 120 países, así que no sorprende que se haya convertido en el más relevante del año en el contexto de una crisis climática que puede poner en peligro la vida como la conocemos.
Fuentes: