El acoso callejero es una problemática que enfrentan muchas mujeres de todo el mundo, todos los días. Tan común parece que muchos lo desestiman. Sin embargo, no es casual que ellas prefieran caminar acompañadas por ciertos lugares o que incluso puedan modificar lo que hubieran elegido vestir, por miedo.
Francia ha decidido ponerle un freno a esta situación protegiendo a las mujeres a través de la ley. La nueva legislación contra la violencia sexista penaliza el acoso callejero con sanciones de entre 90 y 3.000 euros para quienes acosen verbalmente a las mujeres.
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El proyecto de ley fue impulsado por la secretaria de Estado para la Igualdad entre Hombres y Mujeres, Marlène Schiappa, y responde a las denuncias, casos mediáticos y situaciones recurrentes de violencia de género.
Las multas varían de acuerdo a la gravedad y a los posibles agravantes, como que la víctima sea vulnerable. La ley también señala un aumento de la prescripción de los delitos de violación, y endurece los casos de violación y agresión sexual contra menores.
El paso hacia adelante, además, es la creación, a través de esta ley de una nueva figura delictiva: la ofensa sexista.
"Imponer a una persona cualquier intención sexual o sexista que ofenda su dignidad"
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Esto implica reconocer oficialmente una realidad que sucede todos los días y que las mujeres conocen muy bien. Sin embargo, no solo en Francia sino también en muchos otros países del mundo, hay quienes siguen sosteniendo que los piropos a las mujeres en la calle son "inofensivos". Las mujeres, por el contrario, no creen lo mismo.
La aprobación de esta ley se ha producido luego de que se compartieran una imágenes donde se ve a un hombre y una mujer en París. Él le dije algo obsceno, ella le dice que se calle, y él, la abofetea.
El video ha mostrado con un ejemplo que en muchos casos, la violencia o el acoso que comienza siendo verbal y supuestamente "inofensivo" puede agravarse.
Ojalá más países se sumen a este avance y hagan ley la defensa a las mujeres.
¡Felicitaciones, Francia!
Fuentes: