Dafne Schilling propone una mixtura entre yoga, movimiento y meditación. Es una buscadora incansable del disfrute del presente, y de amigarse con uno mismo, de quererse, de perdonarse y abrazarse. En su libro “Doce estaciones del alma", comparte el camino que la llevó a conectarse con su esencia.
Afirma que lo que hace va mutando con el tiempo y explica que hoy se siente una "maestra del movimiento" que acompaña a las personas a "conectarse con su esencia para liberar, sanar o transformar aquello que necesiten atravesar".
¿Qué se logra a través del movimiento?
Desde lo más básico, cómo liberar tensiones, hasta conectar con las emociones y darles espacio para que se manifiesten. A través del movimiento nos conectamos con nosotros y experimentamos lo que es sentimos, y eso es lo más poderoso.
En el último retiro que di, una mujer me dijo: “Dafne, cuando estaba bailando sentí que el cuerpo me decía 'gracias'”. Eso es encender el poder de cada uno, escuchar lo que el cuerpo, mente y alma tienen para decirte. No es solo mental, es una combinación de los tres.
¿Cómo trabajas el empoderamiento femenino?
No hace falta más que poner a las mujeres en movimiento y dejar que aflore lo que tenga que aflorar. Ellas son sus propias sanadoras en el camino, porque la verdad se manifiesta cuando nos movemos. En cada clase, taller y retiro se trabaja el empoderarnos para ser creadoras de nuestro camino.
Propones hacer viajes slow, ¿de qué se trata esto?
Es lo que proponemos para tomarte unas vacaciones sanadoras, que te conecten contigo, que te enseñen algo nuevo y te inspiren a seguir practicándolo en casa. Creemos que viajar para escaparse del mundo, o de la rutina no es la solución. Hay que viajar para inspirarse y que la experiencia te conecte aún más con tu esencia, eso te transforma.
Hacemos varios retiros por año con Modo Flow, una productora de experiencias. Cada vez hay más gente dispuesta a viajar para conectarse con ellos mismos y con personas de todo el mundo, que se acercan a vibrar en nuestra sintonía.
¿Cuál es tu búsqueda?
De apoco fui aprendiendo a no buscar, porque todo lo que hay es lo que tiene que ser, tal y como es. Pero sí creo que en cada momento intento estar más presente, que ninguna tentación “mundana” me aleje de la armonía del ser.
¿Cuál es tu frase preferida?
“Yo me acepto, me amo y me celebro. Aquí y ahora y para siempre”. Es un mantra que creé para mis alumnas y estuvo muy presente en mi primer libro. Algunas incluso se lo tatuaron. Creo que nos ayuda a aceptar lo que es y nos invita a abrazarnos en cada momento, sin importar los resultados.
Pero para abrazarnos mejor, hay tres pasos: darle espacio a lo que sentimos, ponerlo en movimiento, y aceptarlo tal cual es. Como dice Pema Chodron: “el momento presente es tu maestro perfecto.”
¿Que recomiendas hacer cada día, para vivir en el presente y de manera consciente?
Para vivir en el presente, meditar, cada mañana. Apenas te despiertas, sentarte y respirar es todo lo que necesitas para equilibrar. También recomiendo moverse, de la manera que cada uno quiera. Para vivir de manera consciente, hay que cultivar presencia y gratitud. Una vez que lo logras, todo te es suficiente.