Oriunda del Valle del Oise, Francia, Frappart tiene 38 años y su camino profesional comenzó a los 13. Es una de las tres mujeres incluidas en la lista de 36 árbitros principales de este Mundial.
Junto a la ruandesa Salima Mukansanga y la japonesa Yoshimi Yamashita, marcan un hito en la lucha por la conquista de derechos vulnerados durante años.
Stéphanie será el árbitro principal este jueves cuando se dispute el encuentro entre Costa Rica y Alemania en la última jornada del Grupo E en el estadio Al Bayt de Al Khor.
Sthephanie Frappart, la gran luchadora
Según informó, es árbitra FIFA desde 2011. Ha logrado una multitud de acontecimientos relevantes para las mujeres en el fútbol masculino, ya que fue la primera en dirigir la segunda división francesa en 2014, un partido de la Ligue 1 francesa y una final de la Supercopa de Europa en 2019.
Y a esto se suma un encuentro oficial de selecciones y un partido de la Champions en 2020 y una final de la Copa de Francia en 2022, por mencionar algunos.
"Es una gran evolución, un reconocimiento de mis cualidades y competencias. Esta es mi línea de conducta desde el principio, me eligen por mis competencias, no por mi género", expresó la francesa antes de la última Eurocopa a los medios.
"Un Mundial es lo máximo, la mayor competición del mundo", reconoció Frappart en Clairefontaine, tras ser nombrada como parte del cuerpo arbitral.
En plena lucha por la igualdad de derechos en el mundo del deporte su participación resulta fundamental.
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Tal como comentó, uno de los momentos más trascendentales de su carrera fue cuando se hizo cargo de la final de la Copa del Mundo 2019 femenina que terminó con una victoria de Estados Unidos sobre Países Bajos.
En ese sentido, el italiano Pierluigi Collina, presidente de la Comisión de Árbitros de la instancia mundial dijo: “El mensaje que les he dado es que no están aquí porque sean mujeres, sino porque son árbitras de la FIFA”.
Y agregó: “Su designación es el resultado de un largo proceso iniciado hace varios años, que comenzó con el nombramiento de mujeres en ciertas competiciones masculinas sénior y juveniles de la FIFA”, dijo, anhelando “que en el futuro la presencia de mujeres árbitras en las competiciones masculinas de alto nivel sea considerado como la regla, más que como la excepción”.
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