Paso a paso: aprende a hacer una mascarilla de limpieza facial casera

La limpieza facial permite mantener la piel del rostro en las mejores condiciones. La buena noticia es que puedes aprender a hacer una mascarilla de manera 100% casera. Dentro de la cosmética facial existen técnicas que permiten elaborar una mascarilla para favorecer la belleza, aprovechando así todos sus beneficios y lograr una mejor nutrición de la piel.

Aplicando una limpieza facial se consigue mejorar las capas superficiales y las más profundas de la piel. Puesto que son diversos los factores que afectan el rostro habitualmente, como por ejemplo los cambios de temperatura, la humedad, la exposición al sol, entre otras cosas. Debido a esto, es bueno saber identificar qué clase de mascarillas se debe usar, tomando en cuenta la ocasión.

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¿Por qué hay que hacer una limpieza facial con mascarilla?

Como bien se sabe, la piel es el órgano más grande del cuerpo humano y es necesario cuidarlo apropiadamente. No obstante, el rostro es una de las áreas con mayor sensibilidad y, por lo tanto, necesita más atención. Siendo entonces una buena idea aprovechar la cosmética para aplicar una mascarilla una vez a la semana para hacer una limpieza facial.

Beneficios de la mascarilla facial

No existe duda de que cada vez son más populares las técnicas de belleza natural, que no solo permiten cuidar la piel, sino la salud en general. Es importante tener presente que antes aplicar cualquier método de cosmética natural, asegurarse que la piel no sea demasiado sensible. Teniendo esto en cuenta, podemos mencionar algunos beneficios de aplicar una mascarilla facial:

Iluminación: A través de una limpieza facial con mascarilla, es posible tener una piel más luminosa y saludable. Logrando que desaparezcan los efectos negativos del estrés, la polución, la mala alimentación y el poco descanso.

Nutrición e hidratación: Este es uno de los beneficios que más destaca de las mascarillas faciales con ingredientes naturales. Puesto que la piel suele secarse por la polución, el aire y otra clase de agentes internos o externos.

Tratamiento para toda clase de piel: Existen muchos tipos de mascarillas faciales y siempre habrá una que se adapte el tipo de piel que tienes. La cosmética natural es bastante amplia, solo hay que recordar no usar ingredientes que te provoquen alguna reacción desfavorable.

Mascarilla de limpieza facial de avena y limón

Existen ocasiones donde no es posible controlar los brillos que provienen de una piel grasa. Para este tipo de casos lo que se busca es disminuir este exceso, escogiendo una mascarilla con ingredientes como la avena y el limón. Solo tienes que colocar en un recipiente dos cucharadas de avena en copos, dos de zumo de limón y dos de yogur.

Una vez que los ingredientes han sido mezclados, deberás aplicar esta mascarilla con masajes suaves y dejarla actuar por unos 15 minutos. Pasado este tiempo, asegúrate de limpiarte sin tener que frotar y te darás cuenta de que funciona bastante bien. Ya que el limón tiene un excelente poder exfoliante y antibacteriano, con el que es posible eliminar los granos y los puntos negros.

Mascarilla de limpieza facial con aguacate y plátano

En caso de tener inconvenientes de sequedad y enrojecimiento, lo recomendable es preparar una mascarilla de limpieza facial que ofrezca nutrición. Para eso necesitarás medio aguacate, una cucharada de miel y un plátano. Mezcla bien todos los ingredientes y cuando la apliques, deja que actúe por unos 10 minutos para luego retirarla. El resultado será sorprendente.

No solo favorecerá la belleza de la piel, puesto que el aguacate ofrecerá una hidratación totalmente única. Protegiéndola de las agresiones que ocasionan los agentes extraños, que son muy peligrosos para la salud cutánea. Por otra parte, el plátano suaviza, nutre y regenera las células del rostro.

Limpieza facial con mascarilla de chocolate

Lo mejor de esta clase de mascarilla es que funciona bastante bien con cualquier tipo de piel. Mezcla en un recipiente dos cucharadas de cacao que no contenga azúcar, una cucharadita de crema que uses a menudo y otra de aceite de oliva. Obtendrás un resultado sorprendente gracias a las propiedades antioxidantes que posee el cacao.

Limpieza facial con otras mascarillas caseras

Como ya se ha mencionado, existe una amplia variedad de opciones para elaborar una mascarilla casera para la limpieza facial. Aunque todo va a depender del resultado que quieras obtener. Entre las mascarillas caseras más comunes se encuentran:

Exfoliantes

Esta clase de mascarillas faciales son ideales para el cuidado de la piel, pero es necesario tener presente que no se puede abusar de ellas. No es necesario invertir una gran cantidad de dinero en esta clase de tratamiento de belleza. Puesto que con productos que tienes en casa podrás prepararlas a la perfección, para obtener una piel joven y saludable.

Exfoliante con limón: Se sabe bien que el limón es exfoliante, pero también ayuda a quitar las manchas. Sin embargo, se recomienda usar esta mascarilla en la noche para evitar efectos contrarios, y necesitarás mezclar el zumo de un limón con tres cucharadas de azúcar. Frota la piel totalmente limpia con masajes circulares y enjuaga hasta retirar por completo la mascarilla.

Exfoliante con azúcar: Todos tienen azúcar en casa y esta es una excelente oportunidad de aprovecharla para hacer esta mascarilla rápida. Solo necesitarás siete cucharadas de azúcar y otras cinco de aceite. Se recomienda usar aceite de almendras o uno especial para niños, ya que son más eficientes. En caso de no tenerlo, se puede usar aceite de maíz o de oliva. El mejor momento para aplicar esta mascarilla es después de la ducha, debido a que el rostro está más limpio.

Exfoliante con café: Este es un elemento que funciona para eliminar la celulitis o para eliminar las células muertas y la suciedad del rostro. Puedes usar cualquier crema hidratante que tengas y haz una mezcla con posos de café, para luego aplicarla en el rostro con movimientos circulares. Otra forma de hacerlo es aplicarla cuando te encuentres en la ducha.

Hidratantes

Para notar mejorar en poco tiempo en la piel de rostro es necesario dedicarle tiempo. Antes de aplicar alguna mascarilla, es imprescindible lavar el área para quitar cualquier clase de suciedad o sudor. Siendo el final del día el mejor momento para realizar esta tarea.

Mascarilla de pepino: Aparte de ser un alimento fresco y delicioso, también es ideal para los días con más sol en la playa. Solo tendrás que cortar un pepino y molerlo para formar una pasta que usarás como mascarilla. Extiéndela en el rostro y déjala actuar por 15 minutos para que surta efecto. Después de ese tiempo, retírala con un poco de agua fría y observarás tu piel más fresca.

Mascarilla de frutas: Algunas frutas generan efectos hidratantes en la piel gracias a su elevado contenido de agua. Entre los alimentos que mejor efecto posee para estos tratamientos de cosmética son los plátanos. Que puedes convertirlos en una pasta, que usarás para aplicarla en el rostro y el cuello con suaves movimientos. Deja actuar por 15 minutos y retira con agua fría para activar la circulación de la sangre.

Para combatir el acné

Liberar la piel del acné requiere de mucha constancia, aplicando semanalmente una mascarilla que permita mantener los granos a raya.

Mascarilla de tomate: No solo es un alimento que cuenta con propiedades perfectas para hidratar la piel, también permite exfoliarla y tensarla. Deberás picar un tomate y pasarlo por la piel del rostro, dejando que actúe por 15 minutos. Aclara la zona con agua tibia y observarás los asombrosos resultados.

Renovadoras contras las ojeras y arrugas

Las mascarillas renovadoras permiten lucir un rostro más bonito y una piel más tersa sin ojeras. El aire y el calor pueden afectar esta zona sin que te des cuenta, por lo que la piel tendrá algunos problemas para regenerarse apropiadamente.

Mascarilla de yogur: A medida que pasan los años, las arrugas empezarán a ser algo característico del rostro, y por eso será necesario aplicar una mascarilla para suavizarlas. Mezcla yogur natural con una cucharada de hinojo y algunas hojas de dicha planta. Debes obtener una crema homogénea, aplícala y deja que actúe por 20 minutos.

Mascarilla de miel y huevo: Combinando las propiedades de la miel y el huevo, se consigue reconstruir las células de la piel. Para ello, necesitarás un recipiente donde procederás a batir la clara de un huevo y agrega un poco de miel con zumo de limón. Aplica esta mezcla en el rostro con movimientos circulares y deja actuar por 20 minutos.

Estimulantes

Son mascarillas ideales para las temporadas de temperaturas calurosas, ya que poseen altas cantidades de vitaminas, que serán de gran ayuda para ofrecer vitalidad a la piel.

Mascarilla de fresas: En dado caso que tengas la piel reseca, una buena idea es mezclar miel con fresas, para nutrirla y al mismo tiempo hidratarla. Coloca la mezcla en el rostro, deja que actúe por 20 minutos y retírala con agua fría.

Fuente:

Maxcenter, Sessionestetica.