Al ritmo actual, todavía faltan 99,5 años para cerrar la brecha de género en la política, la economía, la salud y la educación, según el último Informe Global de la Brecha de Género publicado por el Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés).
Pocas mujeres en puestos jerárquicos, estancamiento de los salarios y participación más restringida en los mercados laborales: estas son algunas de las razones a las que la WEF atribuye la brecha de género.
Pero hay una buena noticia: hubo una mejora con respecto a 2018, año en que se estimó que harían falta 108 años para alcanzar la paridad entre hombres y mujeres.
De acuerdo con el informe, la mejora de este año es imputable sobre todo al importante incremento del número de mujeres que participan en política. De todas formas, se estima que la brecha de género política tardará 95 años en cerrarse, frente a los 107 años estimados el año pasado.
En 2019, el 25,2 % de los escaños parlamentarios y el 21,2 % de los cargos ministeriales de todo el mundo estuvieron ocupados por mujeres, frente al 24,1 % y el 19 % de 2018, respectivamente.
“Si bien hubo avances en la representación política, las perspectivas en materia de oportunidades económicas han empeorado en el último año”, aseguran los especialistas. Aquí la brecha aumentó en 2019, pasando del 58,1 % de 2018 al 57,8 %.
Por eso, el gran campo de batalla es la participación económica. Además de encontrar más obstáculos para acceder a cargos jerárquicos, las mujeres tienen un nivel de representación mayor en muchos puestos de trabajo que se han automatizado a lo largo de los años, como los de venta al público o administración.
No menos importante es el trabajo domestico, el cuidado de los hijos y el trabajo voluntario: a nivel mundial, las mujeres emplean al menos el doble de tiempo en estas prácticas.
“Favorecer la paridad de género es crucial para establecer sociedades fuertes, cohesionadas y resilientes en todo el mundo”, aseguró Klaus Schwab, fundador y presidente ejecutivo del Foro Económico Mundial.
La brecha en el mundo
Los países nórdicos se encuentran entre los más igualitarios: Islandia -el primer país en sancionar una ley de igualdad salarial- lidera la lista; luego Noruega, seguido por Finlandia y Suecia. Entre los países con más desigualdad están Korea, Indonesia, Japón y Rusia.
En América Latina y el Caribe, el mayor empoderamiento se observó en la dimensión política ya que, en esta área, la brecha se redujo en un 5%, con Nicaragua a la cabeza.
“Para conseguir la paridad, necesitamos movilizar recursos, enfocar en esa dirección la atención del liderazgo y lograr compromisos para el cumplimiento de los objetivos tanto en el sector público como en el privado”, aseguró Saadia Zahidi, directora del Centro para la Nueva Economía y Sociedad y miembro de la Junta Directiva del Foro Económico Mundial.
Además, si bien advirtió que, de mantenerse la situación actual, no se cerrará la brecha, afirmó que “es preciso actuar para alcanzar el círculo virtuoso que la paridad genera en las economías y las sociedades”.