Ahora que Joe Biden ha tomado su cargo como presidente de los Estados Unidos, comienza a poner en marcha algunas de las promesas que hizo en su campaña. Y como una de las primeras, ordena paralizar la construcción del muro con México y detener la emergencia nacional decretada por su predecesor Donald Trump.
En anticipo a lo que se plantea como una nueva era en la Casa Blanca, Biden, inicia sus compromisos electorales en su primer día de mandato. Realizando diligentemente un amplio proyecto de ley de inmigración. En el que se contempla una vía a la ciudadanía que favorece unos 11 millones de indocumentados en el país.
Sin muro, con ciudadanía en mandato de Biden
Después de 4 años de leyes para los inmigrantes, el equipo de transición de Biden anunció este miércoles los detalles del proyecto demócrata. Ese mismo día fue enviado al Congreso como parte del compromiso que el presidente había dicho de “modernizar” el sistema de inmigración, denominándolo "Ley de Ciudadanía de EE.UU. de 2021".
Se espera que la iniciativa reciba el visto bueno de ambas cámaras legislativas. La misma pretende administrar y proteger de manera responsable la frontera y mantener a las familias y comunidades seguras. Sin dejar de lado el compromiso de administrar mejor la migración en todo el hemisferio.
De ser aprobado el proyecto legislativo de Joe Biden, se convertiría en la mayor reforma migratoria desde el gobierno republicano de Ronald Reagan (1981-1989). En el cual se vieron beneficiados 3 millones de indocumentados. Ya que esta vez la clave es ofrecer una vía a la ciudadanía en 8 años a los 11 millones de inmigrantes indocumentados que se calculan en EE.UU.
Según lo que explica el equipo de transición de Biden, los inmigrantes podrán conseguir un estatus legal temporal. Este les dará la opción de alcanzar 5 años después el permiso de residencia, si cumplen con los requisitos como no tener antecedentes penales y pagar sus impuestos.
Otras órdenes ejecutivas de Joe Biden
Por otra parte, el presidente Joe Biden, también firmó este miércoles una orden ejecutiva para devolver a los Estados Unidos al Acuerdo de París. Este gesto busca regresar a Washington al liderazgo en la lucha contra el cambio climático, lo que fue una de sus principales promesas electorales.
La orden firmada convierte a EE.UU de nuevo en signatario del Acuerdo de París. Del que se retiró oficialmente el 4 de noviembre del año pasado.
Asimismo, el presidente firmó una orden ejecutiva que anula el veto migratorio impuesto por su predecesor a los viajeros de 11 países de mayoría musulmana. El cual era conocido popularmente como “el veto a los musulmanes”. Y obstaculizaba la entrada al país de los nacidos Eritrea, Irán, Kirguistán, Libia, Myanmar, Nigeria, Somalia, Sudán, Siria, Tanzania y el Yemen. Pero que también incluía restricciones para Venezuela y Corea del Norte.