Cómo usar aceite de jojoba para cuidar tu cabello y tu piel

El aceite se extrae de las semillas de la planta de jojoba, que crece especialmente en el desierto de Sonora, en México, y en algunas regiones de Arizona y el sur de California. Si bien es conocido hace miles de años, día a día ha ido ganando popularidad, hasta convertirse en un producto muy preciado, especialmente por la industria cosmética, gracias a su composición nutricional. Es de color amarillo y tiene un olor suave y agradable, similar al de las avellanas.

Podemos encontrar aceite de jojoba en champús, cremas corporales, maquillajes, labiales y más, o bien, podemos usarlo de forma natural.

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Perfil nutricional del aceite de jojoba

Las semillas de jojoba son ricas en un aceite (más similar a una cera) compuesto principalmente por grasas monoinsaturadas y ácido docosanoico. Este último, habitualmente es utilizado en acondicionadores para el cabello y cremas hidratantes por sus propiedades de suavizado.

Las ceramidas de la semilla de jojoba hacen que el producto sea estable frente a las altas temperaturas y no se oxide, a diferencia de otros aceites. Gracias a esto, puede conservarse sin alterarse con el paso del tiempo. Estas ceramidas son muy similares a las que tenemos nosotros en nuestra piel y contribuyen a la reparación, sebo regulación y mantenimiento de la estructura de la piel.

El aceite es rico en vitaminas, especialmente tocoferol (o vitamina E), que es un poderoso antioxidante y juega un papel clave en la protección de nuestra piel y cabello, ayudando a prevenir el envejecimiento prematuro provocado por los radicales libres.

Se destaca también su contenido en ácido linoleico (Omega 6) que ayuda a mejorar la elasticidad de la piel.

Beneficios del aceite de jojoba para la piel

Es útil para todo tipo de piel, especialmente para las pieles grasas y mixtas, con tendencia al acné. Esto se debe a sus propiedades seborreguladoras, que, dependiendo del tipo de piel, aumentará o disminuirá la producción de sebo, ayudando a controlar el acné en pieles mas grasas y revitalizando las pieles más secas.

Esta particularidad del aceite de jojoba, permite que la piel pueda absorberlo con facilidad, sin que quede una película grasa, lo cual hace que los poros queden abiertos.

Las pieles atacadas por el acné se ven beneficiadas gracias a las propiedades antiinflamatorias, antisépticas y antimicrobianas del aceite de jojoba. Su uso regular, como complemento del tratamiento médico indicado, ayuda a limpiar a fondo los poros e impide (gracias a sus propiedades antimicrobianas) que se formen nuevas enquistaciones en la piel, calmando el dolor y desinflamando la zona afectada.

Por otro lado, sus antioxidantes permiten neutralizar radicales libres y disminuir el envejecimiento y la aparición de arrugas. También, tiene propiedades suavizantes, gracias a que activa el metabolismo de la elastina y permite que la piel recupere su elasticidad y, a su vez, limita la pérdida de agua por parte de las células cutáneas, manteniendo una buena hidratación. Todo esto se traduce en una piel más suave y joven.

Y, por si fuera poco, el aceite de jojoba posee un ligero filtro ultravioleta que protege las células de nuestra piel del daño producido por la radiación ultravioleta, actuando como protector solar y como agente protector frente a los patógenos.

aceite de jojoba para prevenir las arrugas

Debemos masajear con 2 o 3 gotas de aceite de jojoba en las zonas afectadas, todos los días, tanto por la mañana como por la noche. Así, el uso regular de aceite de jojoba nos permitirá, con el tiempo, tener una piel más elástica y suave. Como complemento, podemos utilizar aceite de esencial de geranio rosa, rosa mosqueta, nuez de albaricoque, aceite de cáñamo, entro otros.

Beneficios del aceite de jojoba para el cabello

Gracias a sus propiedades seborreguladoras puede utilizarse en cabellos grasos y secos, que se quiebran con facilidad. Los céridos del aceite de jojoba protegen el cabello, ayudando a fortalecerlo desde la raíz hasta las puntas. Por otro, lado le otorga brillo y potencia el color natural del cabello.

Puede ser útil, dependiendo la causa que lo provoque, para tratar la caída del cabello. Cuando la causa de la caída es la acumulación de sebo en el cuero cabelludo, que puede conducir a la muerte del folículo y a la caída, el aceite de jojoba puede ayudar a disminuir este proceso. Aplicar una cucharada sopera del aceite 30 minutos antes de lavarnos el pelo, masajeando suavemente el cuero cabelludo permite terminar con el sebo endurecido.

La aplicación de aceite de jojoba sobre el cabello permite, también, sellas las puntas que ya han florecido, nutriéndolas y mejorando su aspecto. Por otro lado, la vitamina E presente en su composición ayuda a revitalizar el cabello, permitiendo lucir una melena más brillante y suave.

¿Cómo aplicar aceite de jojoba sobre el pelo?

Alrededor de 30 minutos antes de lavarnos el cabello, debemos aplicar 1 o 2 cucharadas soperas del aceite y masajear suavemente. Podemos combinar, para obtener un mejor resultado, con argán, manteca de karité, coco, aguacate o manteca de cacao. Otra opción es agregar 6-7 gotitas de aceite al champú que utilizamos habitualmente y dejarlo actuar durante 3 minutos antes de enjuagarlo.

También podemos hacer una mascarilla para cabellos muy secos y quebradizos. En este caso debemos masajear el cabello con el aceite, cubrirlo con una toalla templada durante 20 minutos y luego lavar el pelo como lo hacemos habitualmente.