Decorar habitaciones a todo color puede ser una gran idea, pero también un gran desafío. Es bastante común ver fotografías de habitaciones que nos gustan pero no lograr el mismo efecto en casa, al intentarlo.
Para eso, lo que hay que hacer es tener en cuenta algunos trucos básicos, que te darán nociones sobre cómo combinar colores y texturas. ¡Apréndelos aquí!
Elegir texturas
Los estampados y las tramas en las telas son excelentes para destacar el color en la decoración. Sin embargo, hay que saber elegirlos.
Cuando la habitación no tiene mucho color y se busca renovarla, una buena idea puede ser elegir un cubrecamas o una alfombra con estampado para cambiar la imagen por completo.
En cambio, cuando la pared o los muebles ya tienen colores, y se quiere agregar otros, lo mejor pueden ser los accesorios como almohadones o floreros, o por qué no, un cuadro que no solo aporte colores sino también un toque de arte y calidez.
Uso del blanco
Uno de los trucos para que la decoración multicolor no sature es aplicar el blanco de forma adecuada. A la hora de elegir estampados de muchos colores, los que tienen fondo blanco pueden ser los mejores, ya que ése será el tono que unifique con los demás muebles o accesorios de la habitación.
Cuando las paredes y el piso tienen al color blanco como protagonista, y los muebles y accesorios intercalan blanco con otros colores, se puede jugar a mezclar tantos tonos y formas como quieras, sin miedo de que nada quede mal.
En una decoración minimalista, algún accesorio con muchos colores pero con el blanco como predominante, como un cubrecamas, puede energizar muchísimo la habitación sin que deje de ser sobria y elegante.
También se puede jugar a intercalar una decoración sobria en colores claros con una pieza a todo color. En ese caso, hay que prestar mucha atención al efecto que quiere lograrse: tanto los colores vivos como los pasteles pueden quedar bien, pero el resultado será completamente diferente.
Colores planos
La alternativa a los estampados son los colores planos; y hay que evitar engañarse: combinarlos no es más fácil que con los estampados, sino más difícil.
Mientras que en los estampados ya hay un trabajo previo de elección de los colores y formas que fue hecho por el diseñador, cuando combinas colores planos todo depende de ti.
Si utilizas muebles y telas pintados de colores fuertes, un truco es conseguir al menos un objeto, como un cojín, que ya traiga todos los colores combinados en sí mismo. ¡Unificará mucho el ambiente!
También existe la opción de combinar colores vivos y fuertes con otros sobrios y planos, como el blanco, el gris o incluso el negro. Esta opción tendrá un aire muy moderno. Cuando en una pared se utiliza un tono sobrio y oscuro como el gris o el marrón, en la otra puedes permitirte algo arriesgado, como este empapelado a todo color.
Estilo bohemio
El estilo bohemio es ideal para los amantes de los colores porque admite la combinación de diferentes estampados, dibujos, formas y tramas, incluso mezclando tonalidades (como las pasteles con los colores fuertes).
El estilo bohemio es tan versátil que habitaciones completamente diferentes pueden ser el resultado de decorar con él. Aquí puedes ver muchas otras ideas para decorar habitaciones con estilo bohemio.
Y tú, ¿cómo piensas llenar de vida y color cada ambiente de tu hogar?