Aunque puede que suene un poco contradictorio, los beneficios del agua con gas contra el sobrepeso, son reales. Pero ¿cómo ayuda este líquido, también conocido como agua carbonatada, a combatir el problema de sobrepeso? La verdad es que existen muchos beneficios y contradicciones que deben tenerse en cuenta antes, durante y después de beber agua con gas.
Los beneficios del agua con gas pueden ayudar a mejorar la salud, especialmente en aquellas personas que padecen sobrepeso. Sin embargo, el agua carbonatada debe tomarse con prudencia, ya que al consumirla de manera excesiva y descontrolada, puede ser perjudicial.
¿Qué es el agua con gas?
El agua con gas, también conocida como agua carbonatada, es simplemente H2O con ácido carbónico. Se trata de un gas que produce las burbujas que tiene este tipo de agua, también es uno de los componentes que se encuentra en la mayoría de las bebidas carbonatadas.
Hay que tener presente que existen varios tipos de agua con gas, esto según la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios). Algunos de los tipos de agua carbonatada más comunes son: las sulfatadas, bicarbonatadas, sódicas, cloruradas, cálcicas y magnésicas.
Cada una comparte la misma composición de ácido carbónico disuelto, es decir, el componente que produce las burbujas en este tipo de bebidas.
¿Cuáles son las principales características del agua con gas?
Ahora bien, aparte de ácido carbónico, el agua con gas contiene otros elementos importantes dentro de su composición. Sodio, nitrógeno, calcio, magnesio y también cloro, componentes muy parecidos a los que se encuentran en el agua común.
Asimismo, el agua con gas tiene un pH entre 6 y 7, por lo que esta bebida carbonatada posee un punto de acidez bastante característico. Las diferencias que existen entre las H2O carbonatadas, dependen principalmente las fuentes de agua utilizadas en su elaboración. Así como también, de los ingredientes añadidos y por supuesto, los métodos de carbonatación.
Según su elaboración, es posible clasificar el agua con gas en dos grupos diferentes. Las que tienen ácido carbónico natural, provenientes de manantiales y las gasificadas, cuyo ácido se añade durante el proceso de elaboración de la bebida.
El sabor del agua con gas entre ácido y amargo, por lo que es una de las bebidas más consumidas en varias partes del mundo. Aunque también hay personas que están en contra, ya que piensan que los beneficios del agua con gas no son los mejores. Sin embargo, se ha demostrado que esta bebida, a base de ácido carbónico, tiene varias ventajas, especialmente, contra el sobrepeso.
¿Puede el agua con gas controlar el sobrepeso?
El agua carbonatada es uno de los productos más consumidos en gran parte del mundo, de hecho, en el año 2011 registró ventas de más de 2600 millones de euros. La verdad que es de esperar, ya que beber H2O con gas produce una sensación casi idéntica a la de beber un refresco o gaseosa.
Lo mejor es que no contiene azúcar añadida ni calorías, por lo que es más saludable e incluso, puede ayudar contra el sobrepeso. En otras palabras, los beneficios del agua con gas van dirigidos a controlar el sobrepeso mejorando la digestión, produce saciedad y no aporta calorías. Por lo tanto, el agua con gas es ideal para aquellas personas que desean mantener su peso ideal o controlar el sobrepeso, ya que su consumo no engorda.
Sensación de saciedad
Así es, uno de los beneficios del agua con gas es que su consumo, produce una sensación de saciedad, necesaria para evitar comer demasiado. El agua con gas hace que el pH ácido del estómago convierta el ácido carbónico en dióxido de carbono.
En otras palabras, dicho proceso causa un poco de presión en las paredes del estómago. Generando así, la sensación de saciedad y seguidamente, disminuye las ganas de comer. Esta es una de las razones por las que algunos expertos recomiendan beber entre uno o dos vasos de agua con gas antes de cualquier comida. Ya que este tipo de H2O con gas permite mantener el control del aporte de calorías.
No aporta calorías
Algunas personas sienten temor de productos como el agua con gas o similares, ya que creen que engordan y provocan sobrepeso. No obstante, este tipo de H2O con gas, al no tener calorías, no causa que la grasa corporal se incremente. Si bien es cierto que, el agua con gas produce que las paredes del estómago se ensanchen, no tiene nada que ver con el aumento de peso.
Para entenderlo mejor, el agua con gas, de la misma forma que ocurre con el agua sin gas, no contiene calorías. Lo que significa, que, en ningún caso, el consumo de H2O con gas, provocará un aumento en la grasa corporal. Siendo este uno de los mejores beneficios del agua con gas para el cuerpo.
Mejora el proceso de digestión
Para aquellas personas que tienen digestiones pesadas, tienen que saber que uno de los beneficios del agua con gas, es que ayuda a mejorar la digestión. Los componentes del agua con gas, junto al ácido y pH del estómago, provocan que la segregación de jugos gástricos se incremente. Esto permite que el organismo digiera fácilmente las proteínas de los alimentos que lleguen al estómago.
Del mismo modo, los beneficios del agua con gas en el proceso de digestión, son realmente positivos. Debido a que mejora los movimientos del intestino, lo que es ideal para aquellas personas que padecen de trastornos estomacales como el estreñimiento. Lo mismo ocurre con los problemas de digestión, disminuyéndolos significativamente.
¿Cuáles son los otros beneficios del agua con gas?
Los beneficios del agua con gas no se centran solamente en el cuidado digestivo y contra el sobrepeso. También aportan la hidratación necesaria para el cuerpo, previene ataques cardíacos y mejora la salud de los huesos.
Son más saludables que los “refrescos”
Así es, el agua con gas, a pesar de que contiene “burbujas”, es más saludable que beber los populares refrescos o gaseosas. Las razones son digamos “obvias” y es que el agua carbonatada es una bebida que no contiene ningún tipo de azúcares ni calorías. Por lo que aquellos fanáticos de la “efervescencia” la H2O con gas es perfecta y saludable.
Hay que tener presente que, muchas personas creen que el efecto de carbonación puede perjudicar el esmalte de los dientes. No obstante, esto no es verdad, ya que el azúcar que contiene este tipo de bebidas es la causante principal del daño en la dentadura.
Mejora la salud ósea
Otro de los beneficios del agua con gas es que no contiene fósforo, uno de los ingredientes más importantes en las gaseosas y refrescos. Estudios científicos demuestran que dicho mineral es causante directo de la reducción significativa de la salud de los huesos.
No obstante, hubo un tiempo en que se creyó que la carbonatación que contienen este tipo de bebidas, causaba seria pérdida de la densidad de los huesos. Más adelante, la afirmación quedó descartada, ya que se demostró que la salud ósea no se ve perjudicada por el consumo de agua carbonatada.
Es buena para el corazón
Hay que mencionar que el H2O carbonatada mejora la salud del corazón. De hecho, existen diversos estudios que demuestran el gran impacto de este tipo de bebidas en los índices de colesterol. El estudio llegó a la conclusión que el consumo de agua con gas genera un incremento del colesterol bueno, también conocido como HDL.
Contiene mayor hidratación
Por último, y no menos importante, el agua carbonatada ayuda a mantener un excelente nivel de hidratación durante casi todo el día. Hay que tener presente que el agua, ya sea con gas o sin este, es vital para que el cuerpo se mantenga lo suficientemente hidratado.
Es importante recordar que, la composición del cuerpo humano es de al menos 60% de agua. Lo que significa, que si no se mantiene la correcta hidratación podría ser perjudicial para la salud. Siendo una de las razones por las que es recomendable beber mínimo dos o tres litros de agua a diario.
¿Qué sucede en el cuerpo cuando se consume demasiada agua con gas?
Si bien es cierto que los beneficios del agua con gas están demostrados científicamente, es importante saber que existen algunas contraindicaciones que deben tenerse presente. Entre las más importantes se puede mencionar las siguientes:
- El agua con gas puede provocar distensión abdominal, es decir, hinchazón en las paredes abdominales. Comer rápido, no masticar correctamente y tragar aire mientras se consumen los alimentos, puede aumentar dicha hinchazón.
- Beber este tipo de agua produce flatulencias, por lo que aquellas personas que ya padecen de este problema, no deben ingerir agua con gas.
- Si se padece de enfermedades como la colitis ulcerosa, celiaquía, intestino irritable o trastorno de Crohn, no es aconsejable beber agua con gas. De hacerlo, podría aumentar de manera negativa los problemas digestivos.
- Si presentas problemas de reflujo o acidez estomacal, bajo ningún motivo se debe beber agua carbonatada. Hay que recordar que esta bebida contiene un pH entre 6 y 7, por lo que solo incrementaría la acidez en el estómago.
- Las personas que padecen enfermedad pulmonar obstructiva crónica o EPOC, no pueden beber esta u otra bebidas similares. Ya que dicha afección causa insuficiencia respiratoria y beber agua con gas hace que el abdomen se hinche, presionando mucho los pulmones.
[También te puede interesar: Descubre cuáles son las causas de la piel seca y los mejores consejos para tratarla]
Fuentes: Saber Vivir, Consumo Claro, Salud + Bienestar.