El porteo ergonómico es simplemente llevar al bebé pegado a nuestro cuerpo, utilizando fulares, mochilas, bandoleras de anillas u otro tipo de porta bebés que nos permitan cuidar nuestra ergonomía -es decir, nuestra anatomía y fisiología- y la de nuestro hijo.
Se sabe hoy que la posición más saludable para la articulación de la cadera es la de piernas en M (la “postura de ranita”), con las rodillas más elevadas que la cola y con completo sostén del porta bebé, de rodilla a rodilla. Por otro lado, se debe respetar la curvatura natural de la columna (similar a una letra C), sobre todo en bebés que aún no sostienen su tronco. Para eso se usa un ajuste que se conoce como “punto por punto” y que abarca toda su columna. Esta postura fisiológica cuida, respeta y acompaña el desarrollo de articulaciones y músculos, a la vez que proporciona otros beneficios.
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Paula Roy, especialista en asesoramiento de porteo ergonómico, co-directora de la Escuela de Porteo Crianza en Brazos y mamá de dos hijos, es una apasionada sobre el tema y transmite su conocimiento teórico-práctico con amor a las familias que desean incorporar este estilo de crianza, seguro y respetuoso. Estas son sus recomendaciones.
Beneficios del porteo ergonómico
Principalmente, le brinda al bebé lo que necesita y espera tras el nacimiento: contacto, movimiento, sostén, calor corporal, cercanía al alimento, y estímulos adecuados a todos sus sentidos. Por todo esto, también ofrece beneficios derivados: los bebés que usualmente son porteados duermen mejor, lloran menos, se sienten más seguros y pueden adaptarse mejor al mundo que los rodea.
También se sabe que, a partir del contacto y de la posición al ser porteados, los sistemas del bebé funcionan mejor: gastan menos energía y pueden optimizar el crecimiento, su frecuencia cardíaca es más estable, su respiración se acompasa según la de la persona adulta, regulan mejor su temperatura corporal y tienen mejor digestión.
Como si todo esto fuera poco, también tiene ventajas para la persona adulta que portea: es mucho más cómodo cargar el peso porteando de manera ergonómica que “a brazo pelado”, permite manos libres, favorece una buena higiene postural y tono muscular, aumenta la autonomía y la accesibilidad a lugares en los que con un cochecito sería incómodo o imposible ir. Además, permite viajar en transportes públicos de manera más segura. En las mujeres, disminuye el riesgo de sufrir depresión posparto, ya que aumenta los niveles de las hormonas oxitocina y prolactina.
Además, el adulto que portea va conociendo a su bebé, se empodera en su rol, aprende a detectar y responder mejor a sus necesidades. Todo esto favorece un vínculo de apego seguro, de vital importancia para la salud mental.
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Claves a tener en cuenta para el buen porteo
1. Elegir un porta bebé adecuado a la etapa de desarrollo del bebé.
2. Tener en cuenta pautas básicas de seguridad: nariz y boca bien despejadas, soporte adecuado para cuello y espalda, sostén de rodilla a rodilla, correcto ajuste de la tela, bebé a buena altura.
3. Chequear el estado del porta bebé en cuanto a uso y posible desgaste.
4. Practicar y mejorar la manera de portear.
5. Saber en qué situaciones es mejor no portear: en el auto, en bicicleta o moto, en deportes de riesgo.
Tipos de porta bebés ergonómicos
Para la primera etapa, desde el nacimiento hasta que el bebé ya puede sostener su tronco completamente, Paula Roy recomienda los fulares (elásticos o rígidos) y bandoleras de anillas. Es muy importante poder brindarle el ajuste óptimo, punto por punto, y es con este tipo de porta bebés que se puede dar.
A partir de que el niño puede adoptar posturas verticales por sus propios medios, es decir, se sienta o gatea, se agrega la opción de utilizar porta bebés como mochila ergonómica, bei dai o pouch. Si bien sostienen la postura ergonómica global, no permiten un ajuste punto por punto.
En cuanto al peso, no hay un máximo que podamos estimar para portear, en realidad esto dependerá más del porta bebé que utilicemos. Los fulares elásticos sí tienen un límite de peso, entre los 8 y 9kg comienzan a ceder más, generan rebote y ya no brindan buen soporte. Los fulares rígidos y las bandoleras no tienen un límite específico de peso, mientras que la mayoría de los de confección elaborada, como mochilas o bei dai, están testeados por sus fabricantes hasta los 18 o 20kg.
Por otro lado, para que el porteo sea también respetuoso de la persona adulta, es importante tener en cuenta la fuerza y resistencia de cada cuerpo, evitando portear mucho peso durante tiempos prolongados o de manera asimétrica.
Cuáles no se recomiendan y por qué
Aspectos a tener en cuenta a la hora de elegir un porta bebés
- Que sea de telas adaptables al cuerpo, preferentemente de fibras naturales, que permita lograr y sostener la posición ergonómica ideal.
- Que ofrezca contacto directo entre ambos cuerpos.
- Que permita una buena distribución del peso sobre el cuerpo de la persona adulta.
- Si es para un bebé en su primera etapa, deberá también ofrecer soporte adecuado para la cabeza y ajuste punto por punto.
Si quieres ver cómo colocar un fular utilizando giros con doble nudo al frente, puedes ver este vídeo: