A unos 180 km al este de Medellín (Colombia), en el municipio de Puerto Triunfo, la mansión que solía ser del narcotraficante Pablo Escobar -más conocida como “Hacienda Nápoles”- se ha convertido en un parque temático que los curiosos visitan.

Entre las tantas excentricidades que tenía Escobar, construyó un zoológico para el que le trajeron desde África muchos animales exóticos, entre ellos, hipopótamos.

Los cuatro que tenía Escobar se apropiaron de la principal arteria del río Magdalena, donde ocuparon unos 2.000 km2. En 25 años, los cuatro hipopótamos originales pasaron a ser 80. Los científicos de la Universidad de California, en San Diego, en colaboración con un equipo científico en Colombia, han proporcionado la primera evaluación científica del impacto que están teniendo en los ecosistemas acuáticos del país.

”Esta especie tiene un gran impacto en su ecosistema autóctono en África, y descubrimos que tiene un impacto similar cuando se importa a un continente completamente nuevo con un entorno y fauna completamente diferente”, asegura Jonathan Shurin, profesor de Ciencias Biológicas en la Universidad de California en San Diego.

“Está claro que este efecto podría incluir consecuencias negativas para la calidad del agua y los recursos hídricos al alimentar algas y bacterias dañinas”, agregó.

tras Dos años de investigación

Durante dos años, el equipo de investigación realizó una evaluación de la calidad del agua, los niveles de oxígeno y las firmas de isótopos estables, comparando los lagos con poblaciones de hipopótamos y sin ellos. Además, los investigadores compararon los microbiomas en los lagos, junto con evaluaciones de insectos, crustáceos y otros organismos.

El estudio, publicado en la revista Ecology, reveló que los hipopótamos están cambiando la calidad del agua al aportar grandes cantidades de nutrientes y material orgánico, consecuencia principalmente de las grandes cantidades de desechos que generan, alterando la química y el oxígeno de los lagos.

Los investigadores estiman que la población de hipopótamos continuará creciendo en los próximos años y se estima que puedan llegar a alcanzar una población de más de 1.000 en las próximas décadas.

Este crecimiento plantea muchos desafíos en cuanto a la interacción de la población en expansión con los animales locales, incluidos los manatíes, los caimanes y las tortugas gigantes que habitan en los ríos colombianos.

Fuentes

Ecology