¿Te has preguntado qué hace el banco con el dinero que tienes depositado? La banca ética si. ¿Cuál es la diferencia con banca tradicional? Este tipo de entidades financieras, ponen atención especial en el destino de los fondos y tienen en cuenta criterios éticos, buscando favorecer la educación, la cultura, la inclusión social y el medio ambiente.
¿Qué es la Banca Ética?
La banca ética surge de la toma de conciencia de la ciudadanía acerca de lo que sucede con la relación ahorro-crédito. Estos cuestionamientos aparecen con un movimiento crítico que comienza a buscar una economía alternativa, donde exista una transparencia en las inversiones.
Esto sucede porque algunos críticos comienzan a darse cuenta, que la banca tradicional invertía sólo persiguiendo un criterio de rentabilidad con el dinero que las personas depositaban en sus cuentas. De esta manera, como no existía un criterio ético en la inversión, alguien que luchase por la paz podría estar financiando la producción de armamento sin saberlo.
¿Pero por qué se llama banca ética? Por que su pilar fundamental es el de financiar a aquellas empresas y organizaciones que generan impacto positivo en sectores como la educación, la cultura, el medio ambiente y la inclusión social.
En este sentido, la Banca Ética es similar al Sistema B -en cuanto a propósitos y principios. Como éste, se orienta a trabajar con inversiones basadas en la sustentabilidad, que tengan impacto social y ambiental y que van más allá del beneficio económico como premisa, aunque como cualquier entidad con fines de lucro, lo tienen.
La aparición de las finanzas éticas se remonta a la erradicación de la esclavitud en Estados Unidos en el siglo XIX. Resulta que en ese momento, algunas comunidades religiosas decidieron poner su dinero junto con sus valores y así dejar de invertir en proyectos que estuviesen vinculados a la esclavitud y el alcohol.
Más tarde en el mismo país, durante los años sesenta, la oposición al apartheid y a la Guerra de Vietnam llevó a que organizaciones y ciudadanos se dieran cuenta que con su dinero se habían estado financiando aquellas injusticias y conflictos contra los que ellos protestaban.
Es así que en 1968, se reúne en Holanda un grupo de expertos que buscaba ayudar a que el dinero tuviera un poder de cambio positivo en la sociedad. Por eso, crean luego en 1971 la Fundación Triodos, sentará las bases para la creación del Triodos Bank, un referente del sector que actualmente tiene filiales en Holanda, Bélgica, Reino Unido, España y Alemania.
Como este proyecto, han surgido luego otros que generalmente tienen más acogida en organizaciones del tercer sector. Por ejemplo, la Banca Populare Etica, fundada en Italia que se ha unido a la Fundación Fiare de España, para dar origen a la Fiare Banca ética, con sede en ambos países.
Un rol clave en la difusión de esta filosofía de negocios lo tiene Joan Melé, un banquero oriundo de Barcelona, hoy presidente de la Fundación dinero y conciencia. Hoy en día lidera el primer proyecto de Banca Ética Latinoamérica. Este banco regional, se guiará por los mismos principios que sus antecesores: tomar conciencia acerca de a quién sirve nuestro dinero.
Este tipo de proyectos financieros basados en la sustentabilidad y con foco en el impacto social y cultural, resulta bastante prometedor. Sobre todo, teniendo en cuenta la situación económica de la región y sus problemáticas sociales. Como se basa en la economía real, las inversiones son más seguras.
La Banca Ética Latinoamérica se encuentra aún en estudio de prefactibilidad y pretende abrir sus puertas en Argentina, Chile, Colombia, Uruguay y Brasil.
Banca ética vs banca tradicional.
Si los bancos de todas formas realizan operaciones con nuestro dinero, ¿cuál es la diferencia entre la banca ética y la banca tradicional?
Mientras la banca tradicional opera con nuestro dinero movilizada únicamente por el criterio de mayor beneficio económico y trabaja en algunos casos con inversiones especulativas, la banca ética contempla los beneficios de manera integral y sostenible. La diferencia central está en los valores y principios que orientan las inversiones, así como también en la transparencia de sus actos.
La banca ética se basa en los siguientes pilares:
- Criterios éticos: Se financia sólo a aquellas empresas y organizaciones que impactan positivamente en la sociedad.
- Economía real: La banca ética no invierte en instrumentos especulativos del sistema financiero.
- Transparencia total: La banca ética informa en detalle y periódicamente a sus clientes cómo se usa su dinero y cuál es el impacto de sus inversiones.
- Ausencia de bonos: La estructura de incentivos de la banca ética no contempla el pago de bonos por el cumplimiento de metas financieras de corto plazo.
- Gobierno corporativo: Generalmente un fundación es la que cuida el propósito de la banca ética y el cumplimiento de las metas del negocio.
Fuentes: Sosteniblepedia, Banca Ética Latinoamérica, Revista Triodos y La Nación