Energías renovables y no renovables: definición y ejemplos

¿Energías renovables o no renovables? Aquí una definición de sus diferencias y ejemplos de una nueva forma de producir energía sustentable. En necesario y urgente empezar a cambiar de paradigma energético.

Los combustibles fósiles son agotables y están mostrando además sus terribles efectos ambientales. Y ni hablemos de los efectos políticos y sociales ¿cuántas guerras se han atravesado ya con el petróleo como móvil? ¿cuántas crisis económicas y sociales?

Energías renovables y no renovables: definición y diferencias.

La energía es un elemento esencial de la actividad humana y también vivimos en un mundo que la necesita cada vez en mayor cantidad. Hay fuentes renovables y no renovables, de nosotros depende cambiar hacia un paradigma más sustentable.

Las energías que utilizamos pueden dividirse en estos dos grandes grupos. Las renovables utilizan como fuente los recursos naturales disponibles para transformarlos en otras formas de energía como la electricidad.

energía renovable — Para reducir la emisión de gases invernadero, es necesario modificar la forma en que producimos energía.

Por otra parte, las energías no renovables son las que para generarse requirieron de procesos naturales de millones de años. Una vez utilizadas pierden su capacidad y no se regeneran. Se dividen entre energía fósil (carbón, gas y petróleo) y la energía nuclear.

Conforme avanza el siglo XXI es más inminente el agotamiento de las energías no renovables. El paradigma de las energías renovables propone utilizar fuentes de energía que no sean agotables y que además minimicen su perjuicio al medio ambiente.

Aunque todos los tipos de energías producen algún impacto medioambiental, las renovables son diversas, abundantes y dejan una menor huella. Dado que dependen de factores ambientales, las energías renovables tienen efectos difíciles de predecir, pero el beneficio es que en su mayoría no producen gases de efecto invernadero.

¿Qué son las energías renovables?

Como explicamos más arriba, son aquellas cuyas fuentes son potencialmente inagotables, sea por la energía que contienen o porque se pueden regenerar a través del propio medio natural. Las fuentes de energía renovable son: la energía hidráulica, solar, eólica, mareomotriz, undimotriz, geotérmica y la biomasa.

Curiosamente, este tipo de energías han sido utilizadas por los humanos desde tiempos muy remotos. Algunos ejemplos de ésto son la navegación a vela, los molinos de agua o de viento y pensar las construcciones según la orientación que mejor aprovechase el sol.

Con la Revolución Industrial y la aparición de las máquinas a vapor, los combustibles fósiles cobraron protagonismo. En ese contexto, la magnitud del consumo no hizo pensar en la posibilidad de agotamiento de estas fuentes. Sin embargo, a partir de la década del '70 se comenzó a buscar formas alternativas de producir energía.

Tanto porque la disponibilidad de energías renovables puede garantizarse en el presente y el futuro, como por su bajo impacto ambiental. Por esta razón se las comenzó a llamar energías alternativas.

En la actualidad, Latinoamérica, por ejemplo, es una de las regiones que más consume combustibles fósiles. Por eso, es urgente empezar a pensar formas de orientar la inversión para su reconversión. Para eso, hay distintas estrategias que pueden y deben ser llevadas a cabo por los gobiernos, porque en este caso no todo es decisión individual.

planta de energía solar — Si bien ocupa gran espacio, la energía solar puede por ejemplo instalarse en la propia vivienda.

Ejemplos de energías renovables ¿cuáles causan menos efectos adversos?

Existen muchos tipos de energías renovables, clasificadas según su fuente. Este es un factor muy importante, porque su disponibilidad y diversidad implican un gran punto a favor en la reconversión del paradigma energético.

La mayoría de las energías renovables o verdes, no contaminan, en el sentido que en su modo de obtención no emiten subproductos que dañen el medio ambiente. Las fuente de las que se obtienen determina esto y pueden dividirse en dos categorías: las energías no contaminantes o limpias y las contaminantes. Estas últimas son las que se obtienen de materia orgánica o biomasa y se pueden utilizar directamente como combustible.

Los ejemplos más comunes de energías renovables limpias o no contaminantes son:

Solar: Recogiéndola adecuadamente, la energía solar puede transformarse en electricidad o energía térmica. Un ejemplo de cómo se realiza esto son los paneles solares. Un ejemplo de las ventajas de esta energía es la generación de energía se puede producir en el mismo lugar de consumo, evitando la distribución y las pérdidas que ésto genera.
Eólica: Es la energía obtenida de la fuerza del viente. Un ejemplo de formas de captarla son las turbinas eólicas que convierten esta energía cinética en electricidad. Contribuye a la estabilidad del planeta porque evita las emisiones de carbono.
Hidáulica: Es la que utiliza la fuerza de los saltos de agua. Las centrales hidroeléctricas son un ejemplo de ésta. Es una fuente de energía limpia y autóctona pero que requiere de la construcción de grandes infraestructuras.