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Luego de celebrado el Super Bowl, se supo una estadística que causó alarmas. Un total de 882 aviones privados atravesaron Las Vegas para ver la final. La cantidad de dióxido de carbono emanada es mucho más que la emanada por varios trenes.
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Un evento que atrae a toda clase de público
Y entre ese público, hay muchas personas con gran poder económico. Las gradas del Superbowl muestran a famosos, magnates, políticos, estrellas de la música, etc. Personalidades que cuentan con aviones privados para desplazarse.
Desde hace años, se ha llevado una estadística: la cantidad de jets usados para viajar a la ciudad del Super Bowl. En 2022, por ejemplo, se registró un récord: 931 aviones viajaron a Arizona para la final de fútbol americano de ese año.
Ahora, en 2024, se contabilizaron 882 aviones privados en Las Vegas. Este Superbowl de 2024 sigue mostrando que el evento deportivo desencadena el uso de transportes aéreos, causando una cantidad de CO2 que se escapa de control.
Las Vegas: sede del Superbowl en 2024
El Super Bowl del 2024 se concertó en fecha del domingo 11 de febrero. Tanto el Aeropuerto Harry Reid de la ciudad y las dos pistas de jets ejecutivos más cercanas se llenaron. Los 882 vuelos privados lo abarcaron todo.
La famosa cantante Taylor Swift voló desde la ciudad de Tokio, en Japón, llegando a los Ángeles. Desde ahí, tomó otro vuelo hasta Las Vegas. Este tipo de traslados conllevan una gigantesca cantidad de CO2, lo cual es una gran contaminación.
El otro problema es que hubo muchos jets privados: aviones que trasladaban a pocas personas. No son vuelos masivos, donde se aprovecha al máximo el espacio del avión. Desde hace años, se busca que la aviación civil sea más ponderada en sus viajes.
Lo cierto es que el Super Bowl está en el ojo del huracán por los vuelos que implica. En cada ciudad donde se realiza, muchas personas arriban en aviones privados. Los aeropuertos colapsan, como si fuesen estacionamientos.
La contaminación de los aviones
El combustible de avión libera mucho dióxido de carbono. Además, lo hace a gran altura: causando un impacto inmediato en las nubes y atmósfera. Por eso, se le ha señalado como uno de los causantes del efecto invernadero.
Se habla de minimizar estos transportes. Pero, hay momentos en que muchos vuelos suceden a la vez. Tal es el caso del Super Bowl, que ahora tiene fama de ser uno de los sucesos deportivos más contaminantes del aire.
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¿Sospechabas esta arista contaminante de un evento como el Super Bowl? Pues, otros eventos multitudinarios tienen ese mismo achaque. Incluso, las cumbres internacionales del ambiente conllevan el uso de vuelos internacionales en cantidades.
Fuente: redaccion.com.
