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Es probable que toda nuestra vida no hayamos visto a los insectos como una opción para alimentarnos. Sin embargo, resulta que ellos son una buena fuente de alimento. Por esta razón, la ONU promueve que se coman para poder salvar el planeta de los problemas generados de la ganadería y agricultura intensiva.
La crianza de insectos para el consumo humano o constituye ningún riesgo para el planeta. A diferencia de la ganadería que produce el 14,5 de los gases de efecto invernadero según la coordinadora estatal Stop Ganadería Industrial.
Los líderes de la institución plantean que se debe analizar sobre el cambio de nuestro estilo de alimentación, ya que ser vegano tampoco es algo que salve al mundo. Miles de kilómetros de suelo son explotados y mucha agua es utilizada con el fin de producir productos en específicos. Un ejemplo de ello es la producción de aguacate.
Insectos podrían ayudar a mejorar la nutrición
La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación asegura que estos animales podrían ayudar a mejorar la nutrición. Y a su vez disminuir la contaminación por gases de efecto invernadero en todo el mundo.
Ellos son conscientes de que muchos lo verán como algo extraño, pero lo cierto es que al menos 2 millones de personas en el mundo ya completan su dieta con insectos. Los más populares entre ellos son las avispas, escarabajos, saltamontes, larvas, etc.
En este sentido, en un fragmento del informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación señalan: “Los insectos están en todas partes y se reproducen rápidamente, y tienen altas tasas de crecimiento y conversión alimenticia y una baja huella ambiental. Son especialmente importantes como complemento alimenticio para los niños desnutridos”.
¿Y los veganos como verán esta idea?
Muchos se preguntarán si esta nueva dieta será aceptada por los veganos como carne. Pero cabe destacar, que para que exista comida vegana se usan insecticidas que cuidan los huertos. Esto implica la muerte anual de millones de pequeños insectos en el mundo que podrían salvar vidas. Y si bien no son ganados, tampoco se les permite vivir para que las frutas y verduras puedan llegar a la mesa.
La propuesta de incluir insectos como parte de nuestra alimentación sería interesante conforme mejore la presentación. Si se especializan chefs en estos platos el público lo verá de una mejor manera. De ese modo comprenderán que es delicioso, nutritivo y además ayuda al medio ambiente.
Un estudio demostró que 100 gramos de orugas tienen alrededor de 28.2 gramos de proteínas, a diferencia del mismo peso en carne molida que solo tiene 27.4 gramos. Los expertos de le ONU aseguran que, si bien es una iniciativa que puede no ser recibida de la mejor manera en un inicio, igualmente vale la pena intentarlo por la gran cantidad de beneficios que traería su adopción.
Se trata de mejorar la alimentación a la vez que se ayuda al mundo a recuperarse de las intensas actividades humanas.
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