La provincia de Córdoba enfrenta graves incendios forestales que han afectado zonas como Capilla del Monte, San Marcos Sierras, Los Cocos, Ascochinga, Villa Berna, y Chancaní. Unos 800 bomberos están desplegados, apoyados por 7 aviones hidrantes y 6 helicópteros, para controlar los cuatro focos activos de incendio que ya arrasaron con 16 mil hectáreas. Las condiciones climáticas, con fuertes vientos y altas temperaturas, han agravado la situación. El foco originado en Capilla del Monte sigue avanzando y en la localidad de La Granja, bomberos voluntarios y brigadistas se preparan para detener el frente.

Actualmente, se registran cuatro focos activos en la provincia. El más extenso comenzó en Capilla del Monte, específicamente en Dolores, y se ha extendido hacia Los Cocos, alcanzando la zona de Las Gemelas y llegando también a San Marcos Sierras. Otro foco importante se localiza en la región de Ascochinga. Sin embargo la situación más crítica sucede en San Marcos Sierra, donde las viviendas sufren los mayores riesgos.

El tercer foco se sitúa en Chancaní, en el oeste de la provincia, mientras que el cuarto afecta a Villa Berna, en el Valle de Calamuchita.

El impacto ambiental también es significativo, afectando áreas boscosas y zonas rurales. Las brigadas trabajan día y noche para evitar que las llamas lleguen a más viviendas. A pesar de la gravedad de la situación, no se han reportado víctimas fatales hasta el momento. Las comunidades afectadas y las autoridades están en alerta máxima mientras esperan que la ayuda y los esfuerzos continúen para sofocar los incendios.

Estos incendios destacan la vulnerabilidad de Córdoba ante el fuego, especialmente en temporadas secas. La provincia ha enfrentado numerosos incendios en años anteriores, y las causas, a menudo, incluyen tanto factores naturales como acciones humanas.

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Un pueblo evacuado y devastado

El último domingo, unos 600 bomberos desplegaron fuerzas en combatir el fuego. A la vez que se llevaron a cabo decenas de evacuaciones en la localidad de San Esteban. Leticia Díaz, secretaria de Gobierno, informó que cinco casas fueron destruidas por completo y varias más resultaron dañadas en alambrados, corrales, tanques de agua y cables.

"Debimos evacuar todo el pueblo. Estuvimos varios días sin luz, lo que afectó el suministro de agua, ya que no se podía bombear. La situación es devastadora. En solo 10 minutos el cielo se oscureció, las cenizas empezaron a volar y el aire se volvió irrespirable. Afortunadamente, logramos evacuar a las familias", expresó Díaz en diálogo con el periodista Andy Ferreyra, de PERFIL CÓRDOBA.

A pesar de la gravedad de la situación, no hubo víctimas fatales, aunque el fuego ha causado estragos en la fauna local y en el monte nativo.

"Esperamos que los detenidos reciban todo el peso de la ley"

Esas fueron las palabras de la administración provincial en un comunicado oficial. El Gobierno de Córdoba ha solicitado a la Justicia que acelere las investigaciones por el incendio intencional. Los implicados de 25, 29 y 30 años habrían causado el siniestro en un lote de una estancia de la zona. Los tres hombres ya fueron trasladados a una sede policial y quedaron a disposición de la Justicia.

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